Los embalses andaluces han aumentado sus reservas de agua en la última semana en 129 hm3, lo que significa un 1,08 por ciento más, hasta situarse en un 29,17 por ciento de su capacidad total, que suponen 3.491 hm3.
Andalucía encadena varias semanas de subidas de agua embalsada tras las lluvias registradas, lo que ha permitido romper una tendencia muy preocupante de continuos descensos en plena situación de sequía.
Si se compara la situación actual con la de hace un año en estas mismas fechas, se registran 82 hm3 menos, ya que los recursos almacenados eran 3.573 hm3.
Según los datos que ha analizado este martes el Consejo de Gobierno, en la Demarcación Hidrográfica del Guadalquivir se ha producido un incremento de 99 hm3 (+1,23 %) hasta los 2.399 hm3 , lo que representa un 29,88 por ciento.
En las Cuencas Mediterráneas Andaluzas, el agua embalsada ha aumentado en 8 hm3 (+0,69 %) hasta alcanzar los 258 hm3 , lo que representa un 22,38 por ciento de su capacidad.
La demarcación Guadalete-Barbate registra un incremento de 16 hm3 (+0,97 %), hasta un 21,08 por ciento de su capacidad, mientras que la demarcación del Tinto-Odiel-Piedras-Chanza acumula 486 hm3 de recursos hídricos embalsados (43,6 % de su capacidad) tras un incremento de 6 hm3 (+ 0,54 %).
Andalucía pide un pacto nacional por el agua
Por otra parte, con motivo del Día Mundial del Agua, que se celebra el 22 de marzo, el Consejo de Gobierno ha aprobado una declaración institucional en la que pide un gran pacto nacional, resolver de forma negociada "conflictos" relacionados con el Trasvase Tajo-Segura, o revisar el Convenio de Albufeira, que regula el reparto del agua en el Guadiana entre España y Portugal, para aumentar recursos en Huelva.
Además, aboga por la regularización del trasvase desde la demarcación del Tinto, Odiel, Piedras y Chanza hasta el Guadalquivir, para garantizar los volúmenes necesarios para el abastecimiento a las poblaciones de Matalascañas y El Condado, y facilitar la sustitución de aguas subterráneas por superficiales, "contribuyendo a mejorar el estado de las masas de agua en Doñana y su entorno".
La Junta defiende la autorización del trasvase de Iznájar a los municipios del norte de la provincia de Málaga y la revisión de las normas de explotación del trasvase Negratín Almanzora para garantizar, al menos, los volúmenes necesarios para el abastecimiento de las poblaciones en el levante almeriense también durante los años secos.
También pide que se agilicen las obras hídricas de interés geneal del Estado; infraestructuras relacionadas con el ciclo integral urbano del agua; para modernización de regadíos; e infraestructuras para fomentar la producción y el autoconsumo de energías renovables, como plantas solares fotovoltaicas y centrales hidroeléctricas reversibles.