Un grupo de seis mujeres y niños refugiados que de forma particular han huido de la guerra de Rusia contra Ucrania han llegado este martes pasado el mediodía a la estación de autobuses de Granada para reunirse con familiares, miembros de la comunidad ucraniana en la ciudad, que los han acogido en una casa del barrio del Albaicín.
Estas primeras llegadas están siendo organizadas y recibidas por la comunidad ucraniana en Granada, como algunos de sus representantes ya adelantaron que harían el pasado viernes, en una reunión en el Ayuntamiento, y no están en el marco del dispositivo del consejo municipal de cooperación para el desarrollo, en el que también hay integradas ONG que trabajan en labores de acogida, que se coordinará con los Gobiernos central y andaluz.
Procedentes de Madrid, los que han arribado este martes son seis familiares del sacerdote ucraniano Svyastoslav Myronyuk, que acompañaba este pasado lunes al arzobispo de Granada, Javier Martínez, en la rueda de prensa en que anunció un dispositivo de acogida de refugiados en el que la Iglesia prevé la apertura de parroquias y si hiciera falta de la Catedral.
En concreto son su cuñada, con cuatro niños de entre 13 y nueve años, y otra sobrina, que llegaban a Madrid este lunes a última hora desde Kiev, en Ucrania, y se trasladaban entonces a Granada en autobús. Mientras tanto el hermano del padre Myronyuk, que oficia con la comunidad ucraniana del rito bizantino en la parroquia del Santo Ángel, en el Zaidín, se queda a luchar en la resistencia contra Rusia.
Por otro lado, cabe recordar que el consejo municipal de cooperación pedía tras su reunión de este lunes a la ciudadanía que prioricen las ayudas económicas a las de alimentos o medicamentos si quieren colaborar con los refugiados y afectados por la crisis humanitaria de Ucrania tras el ataque militar de Rusia. En Polonia pueden adquirirse estos materiales y comprándolos allí hay menos riesgo de que no lleguen finalmente a sus destinatarios, explicaban fuentes de este órgano.
