Según la sentencia, el presunto autor de los hechos tendrá que cumplir una pena de nueve años de internamiento en un centro por el delito de asesinato con robo.
Sus dos compañeros, quienes presuntamente colaboraron con él, también han sido condenados como partícipes en ambos delitos, pero la pena será sólo de siete años de internamiento.
Asimismo, las indemnizaciones ascienden a 10.000 euros para el padre de la víctima y de 60.000 euros para cada uno de los dos hijos del propietario del establecimiento.
La sentencia también recoge en otro apartado una orden de alejamiento de los familiares para los menores, quienes, tras el cumplimiento de la pena, permanecerán durante cuatro años en libertad vigilada.
Posible recurso
Las defensas estudian ahora el posible recurso. En principio, las defensas solicitaban para los acusados que sólo se les juzgase por el delito de robo, ya que entendían que fue uno sólo, mayor de edad, -quien será juzgado próximamente- el que finalmente acabó presuntamente con la vida de Márquez.
La vista contra los menores se celebró durante varios días, a puerta cerrada, en las dependencias habilitadas para ello en el Juzgado de Menores de Algeciras.
Fuentes cercanas al caso explicaron que es probable que la instrucción que se sigue contra el otro implicado, mayor de edad, concluya durante las próximas semanas y se pueda celebrar el juicio.
Los hechos trágicos acontecieron durante el mes de diciembre de 2007 y el Ayuntamiento de San Roque decretó dos días de luto oficial por la muerte del propietario del establecimiento hostelero, quien perdió la vida tras ser acuchillado y atropellado.
Márquez se disponía a cerrar su establecimiento de madrugada cuando fue asaltado, acuchillado y atropellado por el vehículo en el que huyeron sus agresores para robarle la recaudación del negocio. Un vecino le encontró poco después y avisó a los efectivos sanitarios, quienes le trasladaron al Hospital de La Línea de la Concepción, donde falleció.
Conmoción
Tras el asesinato, los vecinos de Puente Mayorga se echaron a la calle conmocionados pidiendo más vigilancia policial en la zona.
Entonces era alcalde accidental de San Roque José Antonio Ledesma, quien se comprometió a incrementar la presencia policial. Una de las primeras medidas tomadas fue que una patrulla de la Policía Local vigilase de forma permanente en la pedanía.
Este medio intentó conocer la opinión del Consistorio a raíz de la sentencia dictada contra los tres menores por el asesinato del conocido vecino, sin éxito.
