Más de cien países subrayaron en el Foro Ministerial Global sobre Medio Ambiente celebrado esta semana en la turística isla indonesia de Bali la necesidad de progresar de forma sustantiva durante los próximos meses para garantizar el éxito de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP-16), que acogerá Cancún (México).
“Todos hemos sentido la urgencia de realizar progresos sustantivos en las conversaciones sobre cambio climático”, destacó el ministro de Asuntos Exteriores indonesio, Marty Natalegawa, en una rueda de prensa tras una reunión ministerial informal sobre calentamiento global.
Para dar un nuevo “impulso” a las negociaciones, las delegaciones subrayaron la necesidad de establecer un sistema de conversaciones entre países “más inclusivo, transparente y abierto”, dentro del marco de Naciones Unidas, para que no se repita lo acontecido en Copenhague.
En la capital danesa, Estados Unidos, China y un puñado de naciones consensuaron el Acuerdo de Copenhague a puerta cerrada.
De forma paralela, las delegaciones participantes apostaron por realizar “acciones rápidas” que impulsen el proceso de negociaciones. Entre estas iniciativas incluyeron la implementación de los sistemas de financiación propuestos hasta el momento a nivel internacional, como los créditos REDD de conservación forestal y las ayudas de arranque rápido y el Fondo Verde anunciados en Copenhague.
En este sentido, destacó la posición de México, anfitrión de la próxima conferencia y responsable de coordinar las conversaciones preparatorias, que abogó en una entrevista con Efe por centrarse en buscar puntos de entendimiento que propulsen el diálogo partiendo del Acuerdo de Copenhague.
El secretario de Medio Ambiente mexicano, Juan Rafael Elvira Quesada, resaltó que en estos momentos de las conversaciones “no interesa” fijar si el acuerdo será vinculante o no, sino dotarlo de un contenido concreto que consiga atraer e involucrar al mayor número posible de países.
Otros actores en Bali, como la Unión Europea, insistieron en perseguir “un instrumento global legalmente vinculante” dentro del marco de Naciones Unidas.
RELANZAR EL PROCESO
Para lograr el éxito de la conferencia de Cancún (México), Elvira Quesada abogó por relanzar el proceso negociador a corto plazo, recuperar el impulso perdido en Copenhague y espolear el diálogo entre las partes.
“México no quiere generar grandes expectativas, sino alcanzar grandes metas. A pesar de las dificultades, México está decidido a forjar algo grandioso”, aseguró el ministro mexicano.
Elvira Quesada subrayó que su país ha acudido al Foro Ministerial Global sin una hoja de ruta preconcebida hacia Cancún, sino a “escuchar” y a “tomar nota”.
No obstante, aseguró que México va a prestar una “atención especial” a los países en vías de desarrollo, especialmente a los latinoamericanos, aunque sin descuidar su “papel crucial” como “puente entre el Norte y el Sur”.
Por su parte, el secretario ejecutivo de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, Yvo de Boer, calificó Cancún como una “gran oportunidad” y abogó por alcanzar un acuerdo global que “suponga una diferencia”. “Tengo expectativas ambiciosas pero realistas para la Conferencia de México”, afirmó de Boer, quien se retirará del cargo a mediados de año.
La mayoría de los participantes en el Foro Ministerial Global sobre Medio Ambiente coincidió en señalar que el Acuerdo de Copenhague era un paso en la dirección adecuada, pero insuficiente.