El propietario del inmueble, José Jiménez Flores, aseguró ayer a este diario que, antes de que el techo “oímos un crujido seco y sólo nos dio tiempo a quitar el televisor y el ordenador, antes de que todo se llenase de escombros”, con el “consiguiente susto” por parte de esta familia.
No obstante, el denunciante asegura que “esta misma situación se da también en el techo de nuestro dormitorio, del pasillo, de la cocina y del baño, ya que sólo en la habitación de nuestro hijo no existe este riesgo”.
Alertados por esta situación, los moradores de la casa avisaron a los Bomberos “quienes nos recomendaron que abandonásemos cuanto antes la vivienda, porque existía el riesgo de más desprendimientos”. Por tanto, “nos vimos obligados a trasladarnos a casa de mis suegros”.
El propietario del inmueble manifestó que “poco a poco hemos visto cómo aparecían las grietas, pero el problema se ha visto acrecentado como consecuencia de las últimas lluvias que han caído en la ciudad”.
Jiménez Flores manifestó que el edificio “tiene una antigüedad cercana a los 70 años y no ha sido rehabilitado” pero “cuando la adquirimos, hace aproximadamente dos años y medio, sus anteriores propietarios no nos avisaron del estado en que se encuentra la vivienda, sobre la que pesa una hipoteca de 150.000 euros que estamos pagando”.
Gestiones
Ante tales circunstancias, el denunciante asegura que “ya he denunciado esta situación a la Delegación Municipal de Vivienda dos veces en el último mes y no nos dan una solución a nuestro problema”.
Además, destacó, “me he dirigido a la Oficina de Rehabiltiación de Viviendas Saladillo-Piñera, del Cortijo Vides y me aseguran que ya se han cerrado los plazos”.
Por tanto, Jiménez Flores reconoce sentirse “totalmente desamparado porque ahora tendremos que buscarnos una vivienda de alquiler, a pesar de tener que hacer frente también a la hipoteca”.
En cualquier caso, el propietario de la vivienda se dirigió ayer a la Delegación Municipal de Protección Ciudadana “para recoger solicitud con la que pueda solicitar el informe de los Bomberos, para presentarlo a la Delegación Municipal de Vivienda, para ver si nos dan una solución” aunque “también nos han remitido a la Oficina de Rehabilitación de la Junta de Andalucía”.
Buscan una solución
Al respecto, de la Delegación Provincial de Vivienda de la Junta, consultadas ayer por este diario, pusieron de manifiesto ayer que “en un trabajo de campo, realizado por los responsables de la Oficina de Rehabilitación Saladillo-Piñera, se dirigieron a las comunidades de propietarios de las viviendas de la calle Andalucía, para asesorarlos, en 2008”, con el objetivo de ejecutar en las mismas “un programa de rehabilitación singular, exterior e interior, de las viviendas y entonces no se mostraron interesados en rehabilitarlas”. No obstante, el denunciante “acudió la pasada semana a la oficina y pidió la rehabilitación autonómica”.
Aunque “la convocatoria estaba cerrada, se le aseguró que se gestionaría en Sevilla la posibilidad de hacer algo en su caso”, al margen del programa que se ejecuta en la actualidad”.
