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Sevilla

David Rubín: “El cómic no puede funcionar como compartimentos estancos”

El cómic español podría llegar a tener el nivel de negocio y aceptación que tiene en países como Francia o EEU pero hace falta colaboración

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  • David Rubín. -

El cómic español podría llegar a tener el nivel de negocio y aceptación que tiene en países como Francia o Estados Unidos, pero para ello es importante, entre otras cosas, una mayor colaboración de todos los sectores que lo componen, y “dejar de funcionar como compartimentos estancos”.


Así lo defiende el historietista gallego más internacional y uno de los referentes del cómic en España, David Rubín, que con su última obra, ‘El fuego’, vuelve a demostrar no solo el importante nivel de su trayectoria particular, sino el buen momento que atraviesan en su conjunto los dibujantes españoles. “Tenemos muchas ganas de lucha, de no dejarnos vencer, de avanzar pese a las inclemencias”, asegura.

Lo explica en una entrevista con EFE en Sevilla, donde decenas de seguidores buscan su firma en un acto organizado por ‘Nostromo’, Premio Eisner a la mejor tienda de cómics del mundo en la Cómic Con de San Diego (California) en 2020, y donde ha presentado su obra.

"Me he desgarrado y he soltado todo lo que tenía que soltar, sin pensar en qué va a pensar la gente de mí, sino en contar una historia que no es complaciente conmigo mismo ni con el lector”, señala sobre este trabajo.

El libro arranca con la noticia de que un asteroide se aproxima a la Tierra en trayectoria de colisión, y Alexander Yorba, un afamado arquitecto de mediana edad, es el encargado de idear y levantar con urgencia una colonia lunar para asegurar la supervivencia de la humanidad, aunque en ese momento le aventuran pocos meses de vida por una enfermedad y reedita toda su vida a lo largo de las páginas del tebeo.

Es la primera de sus obras que se publica simultáneamente en gallego y castellano, y en ella se ocupa tanto del guión como del dibujo, y, visto el resultado, parece contento, porque “es el mejor tebeo que he hecho hasta la fecha, donde he metido todo lo que he aprendido del oficio en estos últimos veinte años”.

“La gente se siente identificada con el protagonista, aunque no habla de cosas bonitas, pero en el fondo sí habla de cosas honestas, de la humanidad, de que todos guardamos errores dentro y problemas de los que nos avergonzamos”, señala, y lo define como “un pobre diablo, alguien que ha construido su vida profesional y personal en base de mentiras, que ha construido un castillo de naipes, de mentiras, que al principio del libro se le viene abajo”.

Un trabajo que llega en un momento en el que el sector cultural parece decidido a levantar cabeza, y David Rubín cree que puede luchar contra todos los elementos que tiene en contra: “que si el covid, que si la subida del precio del papel, la crisis…," y con todo "es importante que se sigan editando tebeos y la gente dé apoyo a estas iniciativas”, aunque admite que, aunque ‘El fuego puede ser su obra más completa’, el mejor libro, para él “siempre es el siguiente que se vaya a hacer”.

Rubín dice estar muy satisfecho del trato que tiene de sus lectores, pero apela a más unión del sector del cómic para que la industria crezca con fuerza, porque "el problema es que fraccionamos todo en compartimentos estanco, lo del autor es del autor, el librero lo del librero…, y así toda la cadena, pero si actuamos en equipo si podemos conseguir hitos, que esto avance, que haya tebeos que funcionen y generen industria”.

Pone como ejemplo que ‘El fuego’ ha significado para él “hipotecar un año de mi vida sin apenas ingresos y sin saber cómo iba a salir, pero se ha agotado la primera edición en menos de un mes, algo raro en España, y eso no se debe solo a mi trabajo, sino a que todos hemos actuado en equipo, como los libreros, no solo donde voy a firmar, sino librerías de toda España que están apostando por la obra, recomendando a lectores, y todo eso al final ayuda a generar mercado”.

“Cuando un cómic triunfa no solo te beneficia a ti, sino a un conjunto mucho mayor que se escapa lo que eres tú", apostilla el dibujante gallego, y gracias a eso, añade, "posiblemente hay gente con su primer libro que lo va a tener editado, porque cada lector que consigues es para todo el sector del cómic”, resume, justo a tiempo de atender a lectores de todas las edades que no solo traen bajo el brazo su última obra, sino distintas ediciones de trabajos anteriores que buscan el tesoro de la firma del autor.

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