El expediente para que se prorrogue por un año el contrato de abastecimiento domiciliario del agua y el alcantarillado ya cuenta con todas las bendiciones a la espera de que la próxima semana pase por el Pleno Municipal para su aprobación. Una prórroga que se hará efectiva a partir del próximo 1 de septiembre, ya que hasta el 31 de agosto sigue vigente la anterior prórroga que fue aprobada en el año 2019.
Cabe recordar que aquella prórroga fue posible gracias al apoyo que Vox dio por aquel entonces al PSOE, sobre todo porque ello conllevaba las obras de mejoras que se han estado realizando en los últimos tiempos en la barriada Bazán por parte de Hidralia. Sin embargo, dicho grupo político supeditó su apoyo al compromiso del Gobierno local de sacar durante estos cuatro años que ahora se cumplen una nueva plica algo que, a la vista está, no se ha cumplido.
Y, llegados a este punto, no hay que eximir de responsabilidad a áreas tan determinantes para un Ayuntamiento como son la Secretaría General o la Intervención, que en este periodo de cuatro años no han sido capaces de sacar adelante la nueva plica. Amén de que el equipo de gobierno no ha dado las explicaciones oportunas a la oposición en numerosas sesiones plenarias sobre los motivos por los que no ha habido un nuevo pliego.
La intención del Gobierno local es que durante el próximo año se haga efectiva la constitución de la nueva empresa mixta que se encargará de la gestión del agua y que fue aprobada en el último Pleno. Una empresa cuyo capital estará en manos del Ayuntamiento en un 51 por ciento y el restante 49 por ciento en manos privadas.
Pero llegados a esta punto, cabe reseñar que el informe de Intervención aportado al expediente de la prórroga que va a Pleno ya deja entrever que será necesario algún año más de prórroga para cumplimentar dicho procedimiento de creación de la empresa mixta. Literalmente reza lo siguiente: “Se comparte la opinión del jefe de servicio de Desarrollo Sostenible relativa a la previsión de que el nuevo plazo de prórroga acordado (1 año), resulte insuficiente para completar el trámite muy complejo de decisión de la forma de prestación del servicio de distribución de agua y alcantarillado, selección mediante concurso público del socio tecnológico, constitución de la sociedad mercantil mixta, inclusión de dicha empresa en los Presupuestos vigentes y determinación del sistema de auditoría pública para control interno de la entidad (informe GSM 1/2023, de 23 de enero)”.
Es decir, que todo apunta a que por estas fechas el próximo año puede estar encima de la mesa la necesidad de otra prórroga y en la que se mantendrá las mismas condiciones que en las actuales.
Más de dos millones de euros
En cuanto a los costes que para las arcas municipales supondrán estos doce meses más, el expediente establece que la propuesta incluye que la aportación dineraria será de 1.158.887,51 euros, una actualización de las fianzas por 564.805,40 euros, diversas dotaciones económicas por un importe conjunto de 361.962 euros y el compromiso de destinar el 3 por ciento del presupuesto anual a campañas informativas y de sensibilización.
Por su parte, Hidralia tendrá que hacer efectivos también una serie de pagos al Ayuntamiento en el momento de la firma del contrato por una cantidad que asciende a 901.215,6 euros. Una cifra que es el resultado del pago de la cantidad establecida en la base 29 del pliego de condiciones y que asciende a 721.245,48 euros; el pago de la mejora o subida sobre la cantidad establecida en la base 29 del pliego de condiciones, que suma 41.214,03 euros; además del canon anual de la concesión (parte fija) que es de 138.756,09 euros.
Otra aportación en metálico que deberá de hacer la actual concesionaria es abonar 0,0139 euros por metro cúbico de agua facturada y cobrada, un cálculo que se hará al final del periodo de prórroga. Además, Hidralia deberá acometer obras de acondicionamiento y mejoras de las instalaciones por un importe de 141.158, por un lado, y de 19.988,80 euros, por otro.
En lo que se refiere del servicio del alcantarillado, la empresa deberá de invertir 96.525 euros en mejoras en las estaciones de bombeo de la ciudad, otros 75.000 euros para el alcantarillado, 31.000 euros en la vigilancia y control de vertidos, además de destinar un 3 por ciento para campañas de sensibilización.