Más de tres centenares de personas reivindican una tradición, la del Orgullo, a las puertas de las elecciones generales. Se trata de una pegada de carteles en grandes ciudades, como Madrid y Barcelona, capitales de provincia, como Málaga, A Coruña, Valladolid y Sevilla y también localidades más pequeñas y pueblos como Benasque, El Sauzal o Guadalajara en los que se señala que "el Orgullo del año que viene se empieza a celebrar el próximo domingo".
Unso carteles que van dirigidos de manera especial a los ciudadanos y ciudadanas que aun dudan si irán a las urnas, para mostrarles la importancia que puede tener su voto en la defensa de derechos y libertadesAsí, ciudadanos, activistas y asociaciones se han sumado a una pegada de carteles que no hace referencia a ningún partido o candidato, pero que ha querido subrayar la importancia de las próximas elecciones para el colectivo LGTBI+. "Desde Logroño y Valencia, pasando por Huesca, Órgiva o Palencia se han sumado personas a la pegada ciudadana" han destacado los promotores de la actividad.
Se trata, señalan, de "un recordatorio que decora desde este martes, las calles en 70 localidades grandes y pequeñas de todo el país". “El Orgullo del año que viene se decide el 23 de julio”, rezan los carteles, que piden que “no te olvides” sobre una bandera LGTBI+.
Del mismo modo, sus promotores han indicado que las celebraciones del Orgullo "se han convertido ya en una tradición, un momento de alegría compartida y reivindicación" por lo que, "precisamente ahora que concluye esa fiesta en muchos lugares de España, toca reivindicar la del próximo año",
De ahí, por eso, unos pasquine que van dirigidos "de manera especial a los ciudadanos y ciudadanas que aun dudan si irán a las urnas, para mostrarles la importancia que puede tener su voto en la defensa de derechos y libertades".
A la pegada, impulsada desde la iniciativa Urna y Toalla, se apuntaron de manera espontánea más de dos centenares de personas. Un grupo de whatsapp ha servido para organizarse, traducir el cartel a varios idiomas y salir de manera coordinada a las calles para pegar los carteles con la bandera LGTBI+.
Desde Urna y Tolllas han deñalado que es "especialmente importante" la presencia de careles en pueblos y localidades más pequeñas, "donde las personas del colectivo LGTBI+ pueden sentirse más aisladas o desprotegidas".
