Los agentes de la Guardia Civil recibieron un aviso de la Central Operativa de Servicio sobre las 06.15 horas en el que se alertaba de una discusión en el interior de una vivienda de la citada localidad.
A la llegada de los agentes, observaron cómo un hombre estaba tirando panfletos religiosos a la vía pública. Los familiares allí presentes explicaron a los agentes que el hombre padece esquizofrenia y que desde algún tiempo no se toma la medicación, lo cual está ocasionando brotes ocasionales.
Tras conminar los agentes en varias ocasiones a que bajara a la calle, el supuesto agresor se introdujo en la vivienda y se asomó a través de la ventana, esta vez provisto de un arma larga con trípode y mira telescópica comenzando a insultar y amenazar a los usuarios de la vía.
Inmediatamente, la Guardia Civil estableció un dispositivo de seguridad para evitar que tanto los agentes como el resto de usuarios de la vía pudiesen resultar heridos.
Tras un largo tiempo de mediación, el agresor finalmente fue convencido por los agentes para que depusiera su actitud y bajara voluntariamente desarmado a la vía pública, accediendo el mismo a los ofrecimientos de los Guardias Civiles para ser atendido por los servicios sanitarios.
Por parte de la Guardia Civil, se procedió a la aprehensión del arma exhibida, además de otra arma corta (ambas de airsoft) y 2 armas blancas que el detenido guardaba en su domicilio y que fueron entregadas voluntariamente por los familiares.
Tras el suceso, el hombre, de 35 años y de nacionalidad española, fue trasladado en ambulancia a la unidad de psiquiatría del Hospital San Frances de Borja de Gandía para ser tratado. Se le atribuye un delito de desórdenes públicos.
La actuación ha sido llevada a cabo por agentes de la Guardia Civil pertenecientes a la Compañía de Gandía.
Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 2 de Gandía.