Los sindicatos, tas celebrar una asamblea con los trabajadores en la mañana de ayer para perfilar la primera jornada de huelga indefinida en el Ayuntamiento, se estableció que los empleados municipales acudan a las ocho de la mañana al Palacio de Congresos, donde se espera que el seguimiento sea del 100%, y a las once se organizará una manifestación que saldrá desde la plaza de la Iglesia. Asimismo, Porras señaló que “no habrá servicios mínimos, ya que no nos pagan”.
El sindicalista hizo un llamamiento para que la huelga cuente con todo el apoyo de la plantilla y puntualizó “que no se conformen con más anticipos” y que “sólo el ingreso de la cantidad que adeudan a cada empleado pondrá fin a la huelga prevista”.
Por su parte, el responsable de la sección sindical de USO, Sebastián Torres, dijo que “se trata de un pulso al Ayuntamiento que los trabajadores no pueden perder”, añadiendo, Jesús González Aragón, de CCOO, que “el objetivo es que, la huelga sea secundada al menos por 5.000 personas”. Por tanto, la huelga general ya ha comenzado hoy y no cesará hasta que las retribuciones pendientes se cobren.
Asimismo, en la noche de ayer los sindicatos se reunieron con el alcalde, quien les informó que “el consejo de la Junta de Andalucía se reunirá el próximo día 25 para tratar sobre el adelanto de los ingresos del PIE y la nivelación con el municipio, “por lo que seguimos sin tener fecha de cobro”, afirmó Torres, quien aseguró que la situación “tiene un carisma demasiado negro”.
Izquierda Unida
Por su parte, Izquierda Unida mostró todo su apoyo de los representantes sindicales del Ayuntamiento para la manifestación, y aseguró que “IU es y seguirá siendo solidaria con cualquier trabajador a quien se le deje de abonar su salario como contraprestación legal del trabajo realizado, como en este caso concreto la plantilla del Ayuntamiento y de la empresa BCM; y con más motivo, por estar su importe contemplado y aprobado en los presupuestos y tener prioridad legal sobre casi cualquier otro gasto”.
Ante la propuesta del alcalde de destinar el 33% de los ingresos de la tasa de descongestión a fines sociales, Izquierda Unida manifiesta que “hay que ser descarado para que los mismos que llevan años y años desahuciando familias de los patios de vecinos, los que se quedan con el dinero que mandan otras administraciones para atender socialmente a las personas que lo necesitan. Ahora después de más de una década de abandono y desatención, pretendan aparecer como personas bondadosas y especialmente preocupadas por la asistencia social”.
