Rocío Caicedo es una vecina de Fines que días atrás pudo cumplir su sueño de visitar Tierra Santa, aunque lo que no podía prever cuando emprendió su viaje es que Hamás efectuaría un ataque que daría pie a un conflicto bélico que la dejaría atrapada en Tel Aviv.
El alcalde de Fines, Rodrigo Sánchez, explica a EFE que esta mujer de 54 años atravesó recientemente una enfermedad y que, tras ser intervenida, su hija cumplió la promesa de llevarla a Israel, ya que “tenía muchas ganas” de acudir a este histórico lugar.
Su marido no tenía vacaciones, por lo que se quedó en Fines, mientras Rocío se trasladaba a Israel con su hija, su yerno, sus dos nietos y su consuegra.
Y entonces el sueño se tornó en pesadilla al verse “atrapada” en un país en pleno estado de guerra, sin posibilidad de regresar por las vías comerciales ordinarias.
Según afirma el regidor de Fines, la mujer ha intentado lograr una solución a través de la Embajada de España “pero no lo ha conseguido”.
“Su hija vive en Suiza y el Gobierno de este país sí que mandó un avión antes de ayer, y al parecer iba a enviar otro este martes, pero no se podían llevar a Rocío porque no es ciudadana suiza”, al contrario de lo que ocurre con su hija, que reside en el país helvético junto a su marido y los nietos de Rocío.
Silvana, la hija de Rocío se ha negado a dejar sola a su madre y, al parecer, finalmente han logrado encontrar un vuelo con una compañía privada que despegaría este miércoles desde Jordania, tal y como apunta el regidor de Fines, quien asegura que si finalmente no pudiera volar mañana, desde el gobierno local se haría todo lo posible para mediar en la búsqueda de una solución.
Según adelanta este martes el periódico ‘La Voz de Almería’, la familia “ha intentado obtener una respuesta” de la Embajada de España “mediante teléfono, e-mails…” aunque siempre les han remitido “a que miremos los vuelos que hay de las compañías hacia España”.
“¿Qué hacemos si lo cancelan (el vuelo del miércoles)? ¿O si Suiza nos envía el avión antes y ella no puede subir? No puedo dejar sola a mi madre, no sabe inglés y aquí es la única forma en la que se podría mover y más en una situación como esta”, explica Silvana al diario.