El consejo de administración de la Empresa Municipal de Aguas (Emasa) de Málaga ha aprobado de manera definitiva la modificación de las ordenanzas relativas a los servicios de abastecimiento, saneamiento y depuración de agua que actualiza las tarifas. Por su parte, la junta de gobierno local también ha validado el expediente para que pueda continuar su tramitación con el objetivo de que todo el proceso se culmine a mediados de 2024.
Así, si desde el Ayuntamiento en un comunicado, han insistido en que en estos ocho años el incremento de costes (el IPC en la provincia ha subido un 27,3% desde febrero de 2016 hasta octubre de 2023) ha sido soportado por la entidad, pero ahora la empresa municipal calcula que el primer año el incremento medio en los hogares será del 32,8% frente al 42,5% previsto inicialmente, pasando de 14,59 a 19,38 euros al mes (sin IVA y sin el canon de la Junta de Andalucía), lo que supone 4,79 euros más al mes o unos 15 céntimos más al día; en el segundo año de aplicación (mediados de 2025) se subiría en unos 0,36 euros más al mes; otros 0,36 en 2026; 0,48 adicionales en 2027 y otros 0,48 en 2028.
Mientras tanto, la plataforma ciudadana contra el ‘tarifazo’ ha redoblado sus esfuerzos y ha vuelto a concentrarse a las puertas el Ayuntamiento para mostrar su rechazo rotundo. Y aunque han puesto por delante que “la presión activa de la plataforma ha conseguido que este consistorio rebaje la subida del 2024 a un 32%, va a pasar a ser una subida progresiva hasta el 2029 y al final la tarifa va a subir más de un 44% con el canon de la Junta de Andalucía”.
A juicio de de la denominada ‘Plataforma Iniciativa Ciudadana Contra el Tarifazo del Agua’, el Partido Popular “demuestra una vez más su forma despótica de gobernar, al convocar en apenas una semana al Consejo de Administración de EMASA para aprobar la subida de la tarifa sin tan siquiera dignarse a contestar a nuestras alegaciones ni convocar un espacio de participación común como es la Mesa del Agua”.
Así, han criticado que “esta es la calidad democrática del gobierno del Ayuntamiento de Málaga, una apisonadora sobre los derechos de la ciudadanía, despreciando el esfuerzo y trabajo de las organizaciones sociales. No solo se actúa desde la opacidad y la manipulación de datos, además se simula un proceso participativo vacío y estéril para imponer una desproporcionada subida de precios del agua”.
Rechazo de la oposición
Mientras tanto, la viceportavoz socialista, Begoña Medina, ha exigido al alcalde, Francisco de la Torre, “la retirada inmediata del tarifazo del agua” y ha acusado al PP de “mentir a las familias con este tarifazo” porque “no se justifica este robo a las familias, que supondrá hasta un 124% de incremento en los consumos más responsables”, caso del primer tramo de consumo, que tasa a las personas que viven solas en su hogar “especialmente personas mayores”.
Medina ha analizado la documentación ofrecida por el Ayuntamiento de Málaga “enviada dos meses después de que Paco de la Torre informara a los medios en rueda de prensa” recalcando que hasta este viernes, fecha del consejo de EMASA “no hemos tenido ni un solo papel”. Así, ha asegurado que “la concejala del ramo dijo que la subida del precio de la factura se justificaba por el aumento de los costes de energía y de los productos químicos. Si se mira con lupa el presupuesto de 2024, se desmonta completamente su argumento porque hemos pagado ahora menos de lo que se pagó por ellos en 2019, un año en que tuvimos 6,2 millones de euros de beneficio.
“Los productos químicos, por ejemplo, han supuesto sólo 300.000 euros en 2022 y en 2019 se pagó más, mientras que la luz se encuentra ahora en niveles por debajo a 2019. No se justifica en absoluto este sablazo de cinco euros más en la factura cada mes”, ha manifestado la socialista. Además, el propio interventor municipal a través de su último informe “expresa que EMASA no tiene ningún desequilibrio económico, sino todo lo contrario”, por lo que “el déficit de que hablaba Penélope Gómez no existe. No hay justificación para incrementar el recibo del agua, menos en el ciclo de consumo más responsable, por debajo de los 2 metros cúbicos por persona, “el que debería ser más barato, pero se incrementa hasta un 124%, que es inaceptable”.
Por su parte, desde Con Málaga se ha afirmado con rotundidad que con la subida del agua aprobada ahora “se consuma es un auténtico atraco a los vecinos y vecinas de Málaga”.
Desde la confluencia de izquierda, que incluye a Podemos e Izquierda Unida, se ha indicado que estamos ante una decisión que tachan de “antidemocrática y un auténtico atraco a los bolsillos de los malagueños y malagueñas” en palabras del concejal y viceportavoz del grupo Nico Sguiglia.
“El procedimiento para tomar esta decisión ha sido una auténtica chapuza, no han contado con ninguno de los agentes sociales, asociaciones de consumidores, de vecinos, sindicatos, no han contado con nadie”, ha subrayado el edil.
“‘Es una subida draconiana. Lo que proponen es un aumento que sobrepasa en más de 10 puntos la subida del IPC, la inflación, desde la última vez que se revisaron las tarifas. Hablamos de una subida total del 44% en cinco años con un incremento del 32% en el primer año” según Sguiglia.
Por su parte, la concejala y viceportavoz, Toni Morillas ha destacado que “tenemos un ayuntamiento con un presupuesto de 1.000 millones que podría haberse hecho cargo de las inversiones que necesita llevar la empresa para mejorar el sistema de aguas pero, sin embargo, han optado la mano por aumentar la tarifa a las familias malagueñas”.
