Ponce se une así al exgerente de Mercasevilla Fernando Mellet, cuyo abogado pidió declarar nula la grabación en la que los empresarios de La Raza recogieron, el 27 de enero de 2009, la petición de soborno pues fue hecha de forma “torticera” para provocar una serie de comentarios.
En el primero de los cinco sumarios del caso Mercasevilla que llega a juicio, Mellet y Ponce van a ser juzgados por un jurado popular, junto al exdelegado de Empleo en Sevilla ,Antonio Rivas, y la funcionaria Regla Pereira, por exigir 450.000 euros “como una especie de impuesto” que debían pagar a la Junta como condición para ser adjudicatarios de la Escuela de Hostelería en el mercado central.
El escrito de Ponce insiste en que, tras la primera entrevista, de la que no se pueden extraer peticiones concretas, se preparó una segunda “para obtener determinadas manifestaciones”. Para la defensa, la grabación “en sí está viciada” e incluso la reunión “está en su origen premeditada e instigada” con el fin de obtener “manifestaciones autoinculpatorias” que de otro modo no hubieran realizado.