Sáenz de Santamaría, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, se ha limitado a señalar que los principios de la reforma laboral serán la simplificación y la estabilidad laboral, y ha indicado que las fórmulas para conseguir ambos objetivos se conocerán cuando la reforma llegue al Consejo de Ministros, antes de mediados de febrero. Eso sí, la vicepresidenta ha dado una pista: en contratación a tiempo parcial "ya hay mucho trabajo hecho".
Sáenz de Santamaría ha indicado que, "por desgracia", la realidad es que en España ya existe un contrato único, el temporal, pues, según ha denunciado, es prácticamente el único que se hace desde que el Gobierno socialista eliminó el límite al encadenamiento de contratos temporales.
La vicepresidenta reaccionaba con estas palabras al ser preguntada por el artículo de opinión que ha escrito Luis de Guindos para 'The Wall Street Journal', en el que abogaba por un único contrato a tiempo completo, igual para todos los nuevos trabajadores, y por otro a tiempo parcial.
Tras reiterar que los pactos alcanzados hasta ahora por sindicatos y empresarios son "insuficientes", Sáenz de Santamaría ha incidido en que el Gobierno está trabajando en una reforma laboral que tocará aspectos como la contratación, la flexibilidad interna, la negociación colectiva, la formación y la intermediación laboral.
LA REFORMA, AJUSTADA A LA REALIDAD ESPAÑOLA.
Preguntada por si el Gobierno piensa en una reforma al estilo de la de Portugal, la vicepresidenta ha dejado claro que la reforma que presentará en unas semanas se adaptará a la realidad y a las propias circunstancias de España, cuya situación en términos de paro es "de las más graves" de la UE.
Eso no impedirá, ha añadido, que "indudablemente", el Gobierno español siga con "mucho interés" las reformas que están aprobando otros países de su entorno.
Precisamente, el vicepresidente primero de la CEOE, Arturo Fernández, ha pedido que se tome como ejemplo en España la reforma laboral que acaba de firmarse en Portugal. Dicha reforma reduce las indemnizaciones por despido, contempla menos días de vacaciones para los trabajadores y recorta el pago de las horas extraordinarias, entra otras medidas.
"Y BIEN PENSADA".
Por otro lado, Sáenz de Santamaría ha asegurado que la idea del Gobierno es llevar al Consejo de Ministros una reforma laboral "cerrada y bien pensada", para evitar así que se sucedan diferentes reformas legislativas como ocurrió con el anterior Ejecutivo.
La vicepresidenta respondía así al ser preguntada por si el Gobierno no está tardando demasiado en presentar la reforma laboral habida cuenta de las numerosas propuestas que realizó a tal fin estando en la oposición.
Sáenz de Santamaría ha recordado que el Gobierno de Mariano Rajoy no tiene ni un mes de vida y que la reforma verá la luz en "escasas semanas", en el mes de febrero, por lo que ha considerado que no es demasiado tiempo si se tiene en cuenta que el PP asumió el Gobierno el pasado mes de diciembre.