Alrededor de 230.000 personas se han visto obligadas a huir de sus casas a lo largo desde este viernes en la isla de Kyushu, la tercera más grande de Japón ubicada en el sur, a causa de las fuertes lluvias que arrecian esta región.
Solo en la prefectura de Fukuoka, en el norte de esta isla, unas 121.000 personas han tenido que ser evacuadas por las autoridades japonesas. Al menos 41.000 hogares han quedado anegadas en esta región, de más de 58.000 en toda la isla de Kyushu.
La Agencia Meteorológica de Japón ha alertado de que la intensidad de las precipitaciones se mantendrá o incluso aumentará en algunas partes del norte de Kyushu, lo que incluye a la Fukuoka, la región más afectada.
Desde el miércoles, al menos 20 personas han perecido y siete permanecen desaparecidas en las prefecturas de Kumamoto y Oita a causa de los corrimientos de tierras y las riadas provocadas por las intensas lluvias, según ha recogido la agencia de noticias nipona Kyodo.
El gobernador de la prefectura de Oita, Katsusada Hirose, ha solicitado la ayuda de la unidad de autodefensa sobre el terreno del Ejército nipón después de que el río Kagetsu arramblara con la localidad de Hita.
