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Detenidas tres personas acusadas de vender hachís y marihuana en su domicilio

La Policía Nacional relata que las detenciones se llevaron a cabo el pasado 18 de julio, durante una operación policial contra la venta a pequeña escala de sustancias estupefacientes, cuando los agentes registraron el domicilio del matrimonio

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La Policía Nacional ha detenido a tres personas, dos de ellas son un matrimonio, acusadas de la supuesta venta de sustancias estupefacientes, concretamente hachís y marihuana, en su propio domicilio del barrio cordobés de San Lorenzo.

   En un comunicado, la Policía Nacional relata que las detenciones se llevaron a cabo el pasado 18 de julio, durante una operación policial contra la venta a pequeña escala de sustancias estupefacientes, cuando los agentes registraron el domicilio del matrimonio.

   La actuación policial tuvo su origen varios meses antes, tras tener conocimiento los agentes encargados de la lucha contra el tráfico de drogas a pequeña escala de que estos individuos podrían estarse dedicando a la venta de sustancias estupefacientes, concretamente hachís y marihuana en su propio domicilio.

   Por ello, los investigadores establecieron varios dispositivos policiales en torno al posible punto de venta, constatando cómo "varias personas acudían al mismo para, presuntamente, adquirir la droga, llegándola a consumir en las inmediaciones, razón por la cual habían aumentado las quejas vecinales y llamadas a los servicios del 091 en este sentido".

   Durante el registro de la vivienda, se intervinieron 300 dosis de hachís, 16 de ellas preparadas para su venta y, el resto, en lo que se denomina "bellotas"; 37 dosis de marihuana, también preparadas para la venta en paquetes; cuatro armas blancas, "de grandes dimensiones y con restos de sustancias estupefacientes"; y libros de notas con las supuestas ventas realizadas y deudas pendientes con otros posibles traficantes.

   A parte, también se intervinieron 112 euros en diversos billetes y monedas y una esclava de oro, la cual figuraba sustraída un mes antes de las detenciones.

   Cuando agentes realizaron la entrada al domicilio comprobaron que uno de los detenidos se encontraba "cortando parte de la droga intervenida, mezclándola con otros productos a fin de aumentar su peso y, con ello, incrementar las posibles ganancias una vez puesta en el mercado ilícito".

   Los detenidos están acusados de un supuesto delito de tráfico de drogas, ingresando uno de ellos en prisión una vez que fueron puestos a disposición judicial.

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