Cruz Roja Española ha prestado durante el primer semestre de este año apoyo social en distintos asentamientos de inmigrantes de la provincia de Córdoba a un total de 775 personas, lo que supone un incremento del 22 por ciento respecto a las 633 atendidas en el mismo periodo de 2012.
Entre enero y junio, el voluntariado de la institución humanitaria ha realizado salidas --algunas sólo de detección y otras de intervención o seguimiento-- a campamentos situados tanto en la capital como en Puente Genil, Lucena, Baena, Priego de Córdoba, Montemayor, Santaella, Fernán Núñez y Rute, según informa Cruz Roja en una nota.
En el marco de este proyecto --financiado por los ministerios de Empleo y Seguridad Social y Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y por la Consejería de Salud y Bienestar Social de la Junta--, Cruz Roja ofrece una atención socio-sanitaria a los inmigrantes y favorece su acercamiento a los recursos sociales normalizados; de hecho, en muchas ocasiones se les acompaña y se les asesora para la tramitación de documentos tales como el pasaporte, el NIE o la tarjeta sanitaria, así como para la inscripción en las oficinas del Servicio Andaluz de Empleo (SAE).
En este sentido, hay que destacar la colaboración entablada entre la institución humanitaria y varios centros de salud de la ciudad, por la que profesionales de algunos de ellos han realizado tanto campañas de vacunación y tomas de tensión y glucosa como talleres de prevención y educación para la salud aprovechando la presencia en el asentamiento de Cruz Roja.
De igual modo, en las visitas la entidad les reparte material de emergencia, entre el que se incluyen toldos, sacos de dormir, kits de higiene familiar e individual, productos materno-infantiles, bolsas de basura, linternas o garrafas de agua. Asimismo, el personal de la organización distribuye, en sus visitas a estos campamentos, diversos alimentos no perecederos, como pasta, harina, atún, leche o tomate.
Igualmente, el voluntariado trata de informar y ofrecer pautas a los inmigrantes para el control del saneamiento e impacto ambiental de sus asentamientos, con recomendaciones sobre el consumo de agua potable, el almacenamiento de residuos o la realización de hogueras. Y es que la intervención que la entidad realiza desde hace años en los asentamientos de inmigrantes se ha ampliado y diversificado en los últimos tiempos con la incorporación de cuestiones relacionadas con el medio ambiente, la prevención sanitaria y los hábitos ocupacionales y educativos.
Mayoritariamente, los asentamientos de la provincia están integrados por población rumana y, en menor medida, por inmigrantes de origen marroquí, argelino, búlgaro o de otros países diversos. Dado el predominio de población rumana, en las salidas a los campamentos suele ir una mediadora intercultural de esta nacionalidad. Por sexos, son mayoría los hombres, mientras que en la distribución por edades destaca que más de una cuarta parte de las personas a las que se prestó apoyo --210 de las 775 totales-- era menor de 18 años.
Este trabajo en los asentamientos es sólo uno de los diversos proyectos que desarrolla la entidad dentro de su programa de atención a inmigrantes, cuyo objetivo general es hacer frente a las causas generadoras de vulnerabilidad en la población extranjera, al tiempo que se le proporciona toda la ayuda necesaria para llevar una vida digna y lograr su plena integración en la sociedad de acogida.