En concreto, el concurso se dividía en tres lotes, en función de la zona en la que actuará. De esta forma, del primer lote formaban parte las calles Eolo, Clío, Hermes, Helios, así como el camino de Cibeles, contaba con un presupuesto inicial de más de 141.000 euros, I.V.A. y estudio básico de seguridad y salud incluidos. El segundo lote incluía la iluminación del callejón del Almendral y contaba con un presupuesto base de 64.000 euros. Finalmente, el tercer lote incluía la instalación de nuevas farolas en parte de la Cañada de los Barrancos. Hay que recordar que esta vía es la alternativa propuesta por el equipo de Gobierno para desviar el tráfico de entrada a la ciudad, una vez la calle Mendizábal se corte con motivo de las obras del tramo urbano del tranvía.
Para José Luis Ruiz Piñero, delegado de Obras, se trata de “una nueva apuesta” por las infraestructuras de la ciudad, un aspecto que, estén mejor o peor las arcas municipales, “nunca hay que descuidar. Es un paso más para la conveniente mejora del alumbrado de la ciudad, en una de las zonas que se encontraban peor iluminadas”, ha añadido.