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Ridículo que deja al Sevilla sin Copa (0-2)

Sin excusas, los de Nervión tiraron la Copa del Rey en manos de un Segunda B que fue infinitamente superior en el Pizjuán

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  • Inexcusable desastre -

Lo de anoche en Nervión no tiene excusa ninguna. Los de Emery hicieron el ridículo y se dejaron someter ante un Segunda B.

Con un once plagado de novedades, tal y como era preveer, hacía acto de presencia el conjunto de Emery ante el despoblado Pizjuán. Del equipo titular destacó la presencia de Trochowski y Rusescu y el reposicionamiento de M’Bia en el eje de la zaga.

Y eso que el técnico no quería sorpresas. Ciertamente, la intensidad sevillista en el arranque del duelo ante el Racing fue propicia para que ello no sucediera. El Sevilla era dueño y señor, con casi la totalidad de la posesión del cuero y con ocasiones lo suficientemente claras como para haberse puesto por delante en los primeros compases. Pero lo cántabros comenzaron a asustar. En el 29 cuando Ayina se plantó solo ante Varas que de nuevo, como en la ida, el meta era providencial. Fue la ocasión más clara en la primera media hora.

La más clara para los de casa llegó en el 40 en las botas de Rusescu pero el rumano, con todo para el gol, se topó con el meta Sotres, que sacó a relucir sus reflejos. Pero mal, muy mal el Sevilla que comenzaba a sufrir principalmente al inicio del segundo tiempo. El Racing avisaba y los de Emery de disipaban. Los fantasmas comenzabas a revolotear por Nervión. Hasta que en el 61 sucedió lo que se venía mascando. Penalti de M’Bia que le costó la expulsión y Miguélez, con fortuna, no perdonó. El 0-1 hacía justicia, visto lo visto.

No le quedaba otra a un nefasto Sevilla que despertar antes de consumarse el ridículo. Cala, de cabezazo, la tuvo en el 66 pero de nuevo Sotres estuvo providencial. Pero el ritmo era parsimonioso. Sin intensidad, ni por supuesto acierto. Incluso el rival pudo poner la puntilla si Varas con el pie no hubiera sacado un gol cantado. Horrendo. Nefasto. Hasta tal punto que por deméritos propios cayó eliminado, espantosamente, en el 89 tras el tanto de Koné. La sorpresa fue mayúscula y el silencio del Pizjuán sepulcral. Fue el triste adiós a una Copa que no se saboreó.

 

Sevilla FC: Javi Varas; Diogo Figueiras, Cala, M'Bia, Fernando Navarro; Iborra, Cristóforo; Jairo, Trochowski (Carlos Fernández, m.57), Perotti; y Rusescu (Bacca, m.57).

Racing Santander: Dani Sotres; Orfila, Javi Barrio, Agustín, Saúl; Miguélez (Juampe, m.76), Rubén Durán (Iñaki, m.89), Borja Granero, Ayina; Mariano (Nieto, m.68) y Koné.

Goles: 0-1, M.63: Miguélez, de penalti. 0-2, M.90; Koné.

Árbitro: José Luis González González (Comité Castellano-Leonés). Expulsó al sevillista M'Bia en el minuto 62 con roja directa por hacer penalti cortando una clara opción de gol y a Diogo por dos amarillas, en los minutos 72 y 90. Además, amonestó a los locales Rusescu (m.72, en el banquillo) y Cala (m.84) y al visitante Koné (m.74).

Incidencias: Partido de vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante unos doce mil espectadores.

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