El Grupo Municipal Socialista pone en cuarentena los resultados ofrecidos en nota de prensa por el equipo de Gobierno en relación a la campaña navideña tras la reunión celebrada por la Mesa del Comercio. Frente al habitual ‘todo va fenomenal’ del PP, proclamando las exitosas medidas puestas en marcha durante las fiestas, la realidad demuestra un comercio depauperado y que se encuentra en el peor momento de su historia en cuanto en ventas y expectativas de futuro. Sin negar la delicada situación económica por la que atraviesa toda España, con unas altas tasas de paro que ahogan a miles de familias, desde las filas socialistas se recuerda que “con una mejor planificación y estrategias unificadas con las asociaciones de comerciantes, la situación podría afrontarse con otra perspectiva”.
El Secretario General del PSOE de Cádiz y Portavoz Municipal en el Ayuntamiento, Fran González, señala que “la situación de decadencia del comercio es el fiel reflejo de lo que ocurre en la ciudad, una ciudad que languidece y pierde población, capital humano, y tras años de gobierno de Teófila Martínez no tiene una seña de identidad en cuanto a reclamo comercial, artesanal, turístico… Es decir, lo que sería una parte importante de un modelo de ciudad claro y sostenible para desarrollar en el tiempo”.
Si bien desde el PSOE de Cádiz se alienta “la llamada al consenso” manifestada por la alcaldesa en política comercial, espera que no sea una nueva frase vacía de contenido y que busque contentar al sector. Para ello, reclama “un apoyo constante y no sólo con campañas publicitarias puntuales”.
Fran González lamenta el cierre de algunos comercios en el Casco Histórico tras la finalización de la campaña de Navidad y Reyes, “lo que viene a devaluar la oferta comercial del centro de Cádiz, que resulta muy preocupante en algunas de las arterias principales de la red comercial, con numerosos locales y negocios pendientes de alquiler o traspaso. La señora Martínez puede decir lo que quiera y seguir encerrada en su mundo, pero eso no es reflejo de una ciudad próspera. La ciudad que sonríe y aplaude sus ocurrencias políticas sólo existe en las pantallas leds; la real es la que lamenta una tasa insostenible de paro y ver familias empobrecidas”.
