Mañana se cumplen diez años del mayor atentado cometido en España, perpetrado a manos de una célula de terroristas yihadistas. También fueron diez las explosiones que acabaron con la vida de 191 personas que a esa hora viajaban en cuatro trenes de la red de Cercanías de la capital de España a la hora punta de la mañana (entre las 7.36 y las 7.40 horas).
Un día que dejó conmocionado a todo un país, y que abrió una herida que no se cerrará jamás. A muchos les sorprendió la noticia camino del trabajo, a otros a las puertas de la facultad y a la inmensa mayoría de los políticos en plena campaña electoral de las Generales. Hoy hemos recordado con algunos personajes de la sociedad gaditana cómo recuerdan el jueves más trágico de la historia reciente de España.
A Teófila Martínez la noticia le sorprendió camino de Sevilla. “Estábamos en plena campaña electoral y teníamos actos allí. Desde que me enteré de la noticia tuve claro que ya nada volvería a ser como antes en España, al menos por mucho tiempo. Pasé de un sentimiento de pena, desolación y vacío tremendo por la mañana cuando fuimos convocados por el presidente andaluz, a otro diferente, muy raro. Una sensación incomprensible a las pocas horas, en una manifestación -bajo la lluvia- que no olvidaré nunca. Y confirmé lo que había pensado en las primeras horas; ya nada volvería a ser lo mismo.”
Al primer teniente de alcaldesa, José Blas Fernández, le cogió preparándose para ir a trabajar: “Cuando escuché por la radio lo que había pasado lo primero que se me vino a la cabeza fue mi hija. Ella es religiosa y diariamente cogía el tren de El Pozo de San Raimundo para ir al colegio donde daba clase. Me costó localizarla hasta que por fin di con ella. Afortunadamente el día anterior tuvo que ir a Sevilla y no cogió ese tren. Así que lo viví en mis carnes”.
El secretario local del PSOE, Francisco González, estaba repartiendo propaganda electoral cuando lo llamaron del partido para darle la triste noticia. “Entonces reparé en que mi mujer (entonces novia) tenía que coger un tren en Jerez y me entró un miedo terrible. La llamé para que no se subiera a ese tren, prefería ir a recogerla”.
Al concejal de IU, Sebastián Terrada, también le pilló en plena campaña. “Evidentemente suspendieron todos los actos y ya nos llevamos todo el día pendientes de la televisión, como el resto de los españoles.”
El presidente de los hosteleros, Antonio de María, recuerda que ese día la pena invadió los bares y restaurantes. “Fue una jornada de establecimientos vacíos. Nadie tenía ganas de nada”.
