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Almería

Amat (PP) pide a la Junta que \"no eche pelotas fuera\" y \"cumpla su responsabilidad\" para acabar con mosquitos

Pese a ello, el primer edil y presidente de la institución provincial ha afirmado que el Gobierno andaluz \"no se gasta ni un euro en productos\" para frenar la reproducción de los insectos en el paraje natural, al tiempo que ha reprochado su inacción en el cauce del río de la capital

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El presidente de la Diputación de Almería y alcalde de Roquetas de Mar, Gabriel Amat (PP), ha exigido a la Junta este miércoles que "no eche pelotas fuera" y "cumpla con su responsabilidad" a la hora de atajar la proliferación de mosquitos que emana del cauce del Río Andarax en la capital así como del paraje natural de Punta Entinas-Sabinar que, en su caso, afecta al municipio roquetero.

   Así ha contestado Amat a las palabras del delegado territorial de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta en Almería, José Manuel Ortiz Bono, quien insistía este martes en que la responsabilidad sobre el tratamiento de las aguas residuales que discurren por el río Andarax y que, a su vez, fomentan la presencia de mosquitos es de los ayuntamientos de los municipios que las producen y de la Diputación en el caso de los pueblos de menos de 20.000 habitantes a tenor de los cambios en la Ley de Régimen Local.

   "La Junta de Andalucía aplica la nueva ley que ha recurrido para lo que le conviene", ha considerado el líder 'popular', quien ha asegurado que la "responsabilidad" de intervenir en los canales es de la Junta. En este sentido, ha asegurado que también es la Administración andaluza la que puede actuar en el interior del paraje natural de Punta Entinas, que ha calificado de "fábrica de mosquitos".


   Pese a ello, el primer edil y presidente de la institución provincial ha afirmado que el Gobierno andaluz "no se gasta ni un euro en productos" para frenar la reproducción de los insectos en el paraje natural, al tiempo que ha reprochado su inacción en el cauce del río de la capital.

   Asimismo ha añadido que desde enero se fumigan el borde exterior del paraje para evitar las plagas de mosquitos, si bien el interior del paraje es un "criadero", por lo que a su juicio, debe ser atacado desde dentro para controlar las poblaciones. "Habría que atacar la hueva de los mosquitos, pero la Junta no está cumpliendo con su obligación", ha afirmado.

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