Legó puntual. Parece que todavía está jugando al fútbol. Pantalón corto, gafas de sol, polo por fuera y con ganas de abrirse, de hablar, de comentar. La cita era en la sede del club y nos sentamos en una sala que está llena de recuerdos del cercano ayer. Banderines recordatorios de los equipos que, por vez primera, pisaron las instalaciones de Chapín en Primera División. Parece que fue hace unas horas, pero la realidad es que eso pasó y que este equipo está sumido en un mal sueño “que creo que es para todos los xerecistas. Nadie podía pensarse que sucedería esto, por eso ahora es cuando este equipo necesita más el apoyo de todos. No han sido años fáciles y si se quiere salir hacia adelante la gente tiene que estar, unirse. Esto que ha sucedido, la realidad, es que no lo esperaba nadie”, comentaba un Jesús Mendoza del que, a lo peor, tampoco mucha gente esperaba que estuviese donde está después de que no hace siquiera un año fuese homenajeado por el Xerez Deportivo Fútbol Club e, incluso, se enfundase durante algunos minutos su camiseta.
—Me invitaron a un homenaje y no lo podía rechazar. Es igual que si me hubiese invitado otro equipo. También hubiese ido. El que me conoce sabe que siempre acepto este tipo de cosas...,pero, al margen de ello, ahora estoy en el Xerez Club Deportivo y solo quiero hablar de mi equipo.
—Ya, pero estuviste allí y jugaste incluso .
—Ya te digo que fue un homenaje y me presté a ello. Me dijeron si podía jugar tres minutos y lo hice sin mirar nada extraño.
—Pero, Jesús, no solo estuviste en el homenaje, también te sacaste el carnet de socio.
—Me lo saqué porque me dijeron que el Xerez Club Deportivo iba a entrar en liquidación y, al final, hemos visto que no ha sido así. Me saqué el carnet porque todos, entiendo, queríamos mantener la antigüedad de nuestro carnet pero, con el paso de los días y de los meses, hemos visto que no ha habido liquidación, que el Xerez Club Deportivo sigue con vida y ahora han llegado gente de Jerez al club y por eso he regresado. Lo que se habló, lo que se dijo de que el club iba entrar en liquidación no se ha producido y aquí estoy otra vez.
—Mucho se ha hablado de que tu vuelta, o la de Juan Pedro, tiene mucho que ver con el interés de determinados políticos de Jerez.
—Yo no he tenido la oportunidad de hablar con nadie, ni me he encontrado con nadie. Eso te lo puedo asegurar. La gente es normal que opine una cosa u otra, pero yo me dedico a lo mío y no voy a entrar. Cada uno es muy libre de opinar lo que quiera y más en las redes sociales donde todo el mundo lo tiene mucho más fácil para exponer lo que piensa o lo que entienda que deba escribir. En ese aspecto yo no tengo nada que decir, no tengo nada más que apuntar.
—Lo que parece claro es que, por una razón u otra, tu labor al frente del Xerez Club Deportivo, como entrenador del primer equipo, se va a mirar con lupa
—Seguramente e, incluso, algunos posiblemente estarán a la expectativa de que pierda algunos partidos para meter baza, pero esa es la vida del entrenador. El entrenador depende de los resultados, pero yo, sin ver lo que piensan uno u otros, voy intentar trabajar al máximo y muy duro para sacarle el máximo rendimiento a estos chavales, a los que hay que agradecer que hayan firmado por el Xerez Club Deportivo sin cobrar absolutamente nada. Yo les agradezco el gesto públicamente y el lunes, cuando ya esté con ellos, se lo agradeceré de forma personal, porque es muy de valorar lo que han hecho.
Era la tarde del jueves y aún no se conocía dónde ni cómo se podía comenzar a entrenar. Los problemas institucionales son tremendos. Finalmente se va a comenzar a trabajar en el Anexo de La Juventud y a principios del mes de agosto ya se podrá contar con La Granja y con La Canaleja. De todas maneras, aún no es seguro dónde se van a disputar los partidos y ni siquiera la categoría. Hablaba Mendoza de que hay que valorar lo que han hecho los jugadores. También hay que tener en cuenta el valor que ha tenido el eterno número 3 xerecista para meterse en este tinglado.
—Bueno..., tinglado. No diría eso. Este es mi equipo y, como te comenté anteriormente, ahora es cuando más falta hace que le apoyen. Esta gente de Jerez, que han entrado sin ánimo de nada solo de ayudar, me ofrecieron volver y cuando a Paco Peña le salió la oportunidad de irse a otro equipo, me hablaron de la opción de ser el entrenador del primer equipo y no me lo pensé.
—La de gente que habrá esperando a que fracases.
—Yo no soy así, no le deseo el mal a nadie, ni a mi enemigo, aunque creo que no tengo enemigos. Sinceramente me da igual lo que cada uno desee para el prójimo. Yo, por mi parte, no le deseo el mal a nadie y voy a trabajar para que las cosas salgan lo mejor posible.
—¿Qué equipo vamos a ver?
—Primero tengo que ver, sobre el campo, lo que tengo y después tratar de sacarle el máximo rendimiento a los chavales y ver la manera en que ellos se vayan adaptando a mí. Yo tengo mi forma de ver el fútbol y, a partir de ahí, veré lo que ellos pueden ofrecer. La idea es que los jugadores vayan viendo poco a poco lo que yo quiero y que esas formas mías se vayan plasmando sobre el campo.
—¿Pero qué es lo que quiere que haga el equipo sobre el campo, qué es lo que quieres trasladarles a los jugadores?
—Los equipos tienen que tener carácter, personalidad, que se vea que tienen una entidad. Pienso que lo primordial, por encima de todo, es competir y, en ese sentido, estoy convencido que el equipo va a competir. A partir de ahí sacará las cosas que yo quiero de ellos.
—A muchos de estos jugadores que vas a tener a partir del lunes a tus órdenes los ha llamado tú personalmente y muchos de ellos se han deshecho en elogios hacia tu persona cuando han estado en la presentación oficial.
—Sí. He estado escuchando a los chavales en las ruedas de prensa y es de agradecer que hayan tenido palabras bonitas hacia mi persona, pero a partir del lunes saben que les voy a exigir al máximo y que voy a intentar sacarle el máximo rendimiento a cada uno. Ya conocen que voy a estar muy encima y apretándoles para que den todo lo que llevan dentro, sabiendo, además, que aunque el Xerez Club Deportivo esté ahora en Primera Andaluza, por historia, es el equipo más importante de la ciudad y que ellos, se quiera o no se quiera, han hecho un gran esfuerzo por estar aquí y ya que están aquí lo tienen que dar todo por este escudo, por este club, por el Xerez Club Deportivo.
—¿Esté el equipo en la categoría que esté?
—Los chavales ya se han mentalizado de que pueden jugar en la Primera o en la Segunda Andaluza. Es algo que no les hemos escondido, que lo hemos hablado, que se les ha transmitido y ninguno ha puesto impedimento de ninguna clase.
—En qué categoría crees tú que se va a jugar finalmente.
—Creo que en la Primera Andaluza ya que, por lo que se ve, parece que se nos va a respetar la categoría y nosotros con muchas ganas de que así sea y de que salgamos a competir en la Primera Andaluza.
—¿Cómo es la categoría?
—Ahora mismo no sé cómo estarán los equipos. El año pasado, la temporada pasada, sí ví bastantes partidos de la categoría ya que estuve viendo al Jerez Industrial. Observé que es una categoría muy competitiva. Hay equipos que se refuerzan bien porque el fútbol en lo económico está bastante mal y los jugadores bajan de categoría para quedarse cerca de sus casas y las plantillas están más reforzadas. Pero eso no indica nada. Al Xerez siempre se le ha exigido lo máximo y nosotros, evidentemente, intentaremos estar lo más arriba posible.
—¿Ese es el objetivo? .
—El objetivo es competir y estar lo más arriba posible y si se puede dar el salto de calidad se dará, pero sabiendo las posibilidades que tiene está plantilla y cómo está hecha.
—¿Jugarás con un 4-4-2, un 4-3-3?
—Según lo que vaya viendo. El equipo tiene que tener variedad, no acomodarse a un solo sistema de juego. Hay que trabajar la superioridad, la inferioridad cuando te quedas con un jugador menos, saber romper cuando el equipo rival se mete atrás...Hay muchos aspectos del fútbol que hay que trabajar y pulir. Hay que cuidar todos los detalles, porque cualquier detalle puede decidir un partido.
—Partidos que pueden ser ‘a cara de perro’ porque el Xerez Club Deportivo, aunque solo sea por el nombre, saldrá como el rival a batir.
—Es un hándicap, es verdad, que nos vamos a encontrar. Todos los equipos, por nuestro historial, saldrán a ganarnos y van a salir no al cien por cien, sino al doscientos por cien. Tenemos que convivir con esa realidad y saber que todos los partidos van a ser muy difíciles. Es algo que también tengo que inculcarles a los chavales para que en todos los partidos, como nuestros adversarios, den el máximo de sus posibilidades.
—Los rivales, la historia y la realidad de un equipo que, me da el pálpito, es el que tiene que llamar a la afición. ¿Eres consciente también de eso?
—Un poco sí. La gente está un poco indecisa pero al ver los que hemos entrado, Juan Pedro, gente de la casa, puede dar ese paso al frente que se necesita. Como te comentaba al inicio de la entrevista necesitamos la ayuda de todos, ahora más que nunca es cuando se tiene que ver a la gente. Hay gente que está indecisa pero que creo que va a volver. El Xerez Club Deportivo está en una situación complicada, estamos metidos en un rincón con una coraza puesta porque estamos recibiendo golpes por todos los lados, pero estoy convencido de que si aguantamos esta temporada el Xerez puede resistir y subir para arriba.
—Hablas de un temporada crucial para el futuro del club. ¿Tú también te puedes jugar tu futuro como entrenador?
—No, de ninguna de las maneras, Estoy empezando ahora, cómo me voy a jugar mi futuro como entrenador. La carrera de entrenador puede ser también muy larga. He dado el paso, pero no quiere decir que porque dure cuatro partidos esto se ha podido terminar. Claro que no me juego mi futuro como entrenador. Tengo que coger experiencia porque esto es muy largo.
—Los que te critican dicen que te falta carácter para ser entrenador.
—¿Que me falta carácter? No. Eso se lleva dentro. La gente que ha estado conmigo dentro del vestuario sabe el carácter que tengo. Soy tímido, pero el carácter lo tengo. La gente que me conoce, y tú me conoces muy bien, sabes que cuando hay que tener carácter tengo más carácter que nadie. Quizás me cueste algo abrirme a las personas, pero una vez que me abro soy una persona normal y sencilla. El carácter no me va a faltar. El carácter lo tiene uno.
—Y con los chavales tendrás que hablar mucho, porque hay mucho que enseñarles.
—Por supuesto, tengo que enseñarles lo que sé, lo que quiero que hagan y tengo que tirar de mi experiencia, de la experiencia de los entrenadores que he tenido. He estado catorce años en el Xerez y he cogido algo de los entrenadores que he tenido. Ellos, los jugadores, saben que soy uno más de ellos porque hasta hace unos días he sido futbolista, pero también que están aquí para aprender, para luchar, para trabajar, para pulir detalles. Hay muchos chavales jóvenes en la plantilla que quieren comer de esto y hay que ayudarles a que lo consiga.
—Has hablado de entrenadores. ¿Cuál ha sido el que más te ha marcado?
—Hay muchos. Siempre vas aprendiendo, te vas quedando con un poquito de cada uno. Nene Montero me dio la oportunidad de debutar en el Xerez y para mí fue el más importante. Pero el Xerez ha tenido buenísimos entrenadores. Schuster, Esteban, Alcaraz, Murcia...Cada uno con su forma de ver el fútbol y de trabajar, aunque también sabemos que los entrenadores tienen que tener esa pizca de suerte que a veces aparece y otras, no.
—Entrenadores y jugadores. ¿Qué jugador o jugadores crees que pueden ser importante dentro del equipo?
—Nico, que puede que se quede, debe ser importantísimo; Daza, que viene del Algaida y del que tengo muy buenas referencias; Gente veterana como el central Israel Durán; Paquito, el delantero; Barragán y, por supuesto, los chavales jóvenes que tienen que aportar muchísimo y que los veteranos que te he citado tiren de ellos. Hay que conjuntar al equipo porque prácticamente es una plantilla nueva y, por eso, pienso que con el paso de las jornadas se irá viendo lo que yo quiero.
—Hay una conjunción, ya que hablas de conjunto, entre veteranos y jóvenes.
—Eso es bueno en estas categorías. Hay que tener eso para saber en determinados partidos lo que tenemos que hacer y que no se nos puedan escapar puntos por cualquier detalle.
—Siempre se dice que los entrenadores tenéis a algún jugador que es vuestra continuación sobre el campo. ¿Ya lo tienes? Quizá Nene...,que sigue jugando a sus 36 años.
—Fíjate Nene, que fue compañero mío en los juveniles del Flamenco...Es cierto, siempre tienes a alguien dentro del campo que suele ser como el segundo entrenador. Intentaré no tener a uno, sino a alguno en cada línea. Todos los equipos los tiene.
—Para conjuntar a un equipo hace falta jugar partidos. ¿Cuántos encuentros en la pretemporada?
—Bastantes, incluso con equipos de fuera de Jerez que nos van a pagar los gastos de desplazamientos porque no tenemos ni para eso. Hay bastantes partidos señalados y a ver lo que pasa. Estamos también a la expectativa de nuestro Trofeo de La Vendimia.
—Me dices que habrá Trofeo de La Vendimia
—Seguramente. Juan Pedro está trabajando en ello. Nos hace falta que venga un buen equipo para la taquilla y para mantener el prestigio que siempre ha tenido este Trofeo. Siempre han venido grandes equipos y esperamos que consigamos un buen cartel.
—En pretemporada, el partido ante el Jerez Industrial también tiene su morbo
—Sí, claro. Ya se jugó contra el Jerez Industrial y con el Trofeo de La Copa y La Venencia en juego en la época de Pepe Murcia como entrenador del Xerez. Es un trofeo que también tiene su caché.
Íbamos finalizando. Sonaban los móviles y Juan Pedro estaba reunido con Cackic, con Toni López, quizá buscando ese portero que aún hace falta para completar la plantilla de una temporada que abre muchas incógnitas tanto a nivel global de la entidad como a nivel personal de gente como Juan Pedro o el propio Jesús Mendoza...
—De lo que se hable a final de temporada tampoco me preocupa. Ya he dicho que cada uno es libre de expresarse. Yo no tengo problemas en que se me critique, siempre que sea desde el respeto. Estoy curtido en mil batallas tanto para recibir críticas como para escuchar halagos. No me gusta ni lo uno ni lo otro. Lo que me gustaría es que se hable de lo que sea, pero dentro de la normalidad.
—¿Qué te gustaría que se dijese al final de la temporada del equipo?
—Que se ha terminado lo mejor posible y que el Xerez, que es lo primordial, sigue vivo. Va a ser un año importantísimo para la entidad. En lo deportivo llevamos cuatro o cinco años en horas muy bajas e intentaremos cambiar el rumbo para que el Xerez vaya subiendo escalones hasta recuperar el sitio en el que ha estado. Y por supuesto que haya respeto, que eso siempre tiene que existir. Se ve que el Xerez no entra en polémicas, que cada uno siga su camino y que cada uno intente hacerlo lo mejor posible.
Mendoza vive buenos momentos “disfrutando con la familia ahora que no soy jugador, pero cuando me ha llegado esta oportunidad trabajando, planificando entrenamiento tras entrenamiento. Cuando eras jugador terminabas las dos horas y te ibas, el entrenador tiene que seguir trabajando, pensando en la gente y aquí viendo cómo los chavales compaginan trabajo y fútbol”.
