El Gobierno turco ha solicitado formalmente al Parlamento que le autorice a enviar tropas a Siria e Irak y permita la presencia en Turquía de soldados extranjeros para combatir la amenaza yihadista en esos países.
La petición, enviada anoche a la Presidencia del Legislativo, pide dar luz verde al Ejecutivo para "enviar a las Fuerzas armadas turcas a países extranjeros" y "permitir la presencia en Turquía de tropas foráneas".
Ankara justifica esta solicitud en la necesidad de "tomar todo tipo de medidas, dentro de la legislación internacional, contra la amenaza terrorista contra la seguridad nacional de Turquía y toda clase de riesgos de seguridad".
El documento cita expresamente la eliminación de "posibles ataques de organizaciones terroristas desde Siria e Irak" y también los riesgos derivados de una "migración masiva".
Desde que comenzó la guerra civil en Siria, más de 1,5 millones de refugiados sirios han llegado a suelo turco huyendo de los combates entre las fuerzas de Damasco y los distintos grupos rebeldes y el avance del grupo yihadista Estado Islámico.
Sólo en las últimas semanas, unos 140.000 kurdos de Siria han entrado en suelo turco para escapar de la violencia que ejercen los yihadistas en los territorios que conquistan.
La solicitud del Gobierno pide que ese mandato entre en vigor este 4 de octubre y sea válido durante un año.
El mandato autoriza al Gobierno a decidir el alcance, la forma, el momento y el marco en el que desarrollar las operaciones militares.
Aparte de los yihadistas de Estado Islámico, Ankara nombra también a la guerrilla kurda del Partido de los Trabajadores del Kurdistán.
El Parlamento turco viene autorizando desde 2007 al Gobierno a intervenir en el norte de Irak contra las bases del PKK, un permiso que el Ejército ha usado en numerosas ocasiones y que se renueva cada año.
En 2012 se dio un permiso parecido para actuar en Siria, después del derribo de un cazabombardero turco por ese país.
Entre las amenazas citadas por el Ejecutivo se señala la tumba del sultán Solimán Sah, un minúsculo enclave turco en el norte de Siria, protegido por el Ejército.
El Gobierno ha reconocido que fuerzas yihadistas se han acercado a este enclave, aunque no lo han atacado.
Esta solicitud del Gobierno engloba en un mandato común los permisos que hasta ahora venía planteando para poder actuar por separado en Siria e Irak.
La petición del Gobierno se basa en el artículo 92 de la Constitución, que establece que es el Parlamento el que debe autorizar este tipo de medidas militares.
El Legislativo comenzará mañana a debatir la solicitud y se espera que sea votada este mismo día.
Estados Unidos quiere que Turquía, miembro de la OTAN, se una a la coalición internacional que está atacando posiciones de Estado Islámico en Siria e Irak.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha anunciado que la posible participación turca en esa alianza se definirá con detalle una vez que el Parlamento apruebe esta solicitud del Ejecutivo.