El desdoble de la N-IV, “a buen ritmo” pero sin fecha

El desdoble de la antigua Nacional IV, ahora llamada avenida Reina Sofía, es uno de los proyectos que más quebraderos de cabeza está dando a la ciudad. Actualmente, el tramo que es objeto de obras es el comprendido entre el hospital y carretera de El Calvario (a la altura de la cooperativa vitivinícola Nuestra Señora de Las Angustias)y el más sensible a los atascos históricamente. Si a ello se le suma la apertura de Área Sur y Luz Shopping, el resultado son  unas retenciones que en las horas puntas y en las fechas  de compras compulsivas que se acercan ponen a prueba la paciencia de muchos conductores. Pero, aunque no haya plazos, ya queda menos. De un tiempo atrás desde  el Consistorio, escarmentado quizás por las complicaciones que han ido encadenando, prefieren no hablar de fechas, si bien reiteran que este último tramo de la cooperativa “avanza a buen ritmo”. Mucho ha llovido desde 2007, fecha en la que Grupo Baremo 80 inició los trabajos que la crisis acabó paralizando al completo, lo que ha ralentizado la actuación que tanto necesita una de las principales arterias de comunicación en Jerez. Ante el  incumplimiento del Grupo Baremo, el Ayuntamiento asumió desde el inicio del mandato del PP la terminación de la actuación con cargo a la ejecución de los avales. Con algún que otro parón y dificultades, la intervención ha ido avanzando, y con ella la metamorfosis de este tramo para transformar la antigua N-IV en una vía urbana -que enlaza el hospital a Pozoalbero-  mucho más moderna, dotada de todos los servicios e infraestructuras necesaria como son la duplicación de la calzada, nuevo acerado a ambos márgenes, un carril bici de doble sentido y la dotación de alumbrado público. No obstante, este último sigue siendo insuficiente, especialmente a la altura del tramo entre la urbanización de Los Villares a Croft. Un tramo que está prácticamente concluido a falta de retoques y cuyas zonas verdes han sido decoradas en las últimas semanas con curiosos elementos de colores que no han pasado desapercibido entre los jerezanos.
Para los más curiosos hay que decir que se trata de piezas antiguas de control y regulación del sistema de abastecimiento de la Zona Gaditana, cuyo uso ha sido cedido por el Consorcio de Aguas de la Zona Gaditana al Ayuntamiento, que se ha encargado del mantenimiento y conservación. Estos elementos, para los que hay opiniones para todos los gustos, pertenecen a instalaciones del Consorcio, son en concreto dos válvulas de compuerta, dos motores y una válvula de compuerta con válvula antirretorno.