El consejero de Educación, Cultura y Deporte, Luciano Alonso, y el hermano mayor de la Hermandad del Valle, Lucas Maireles, han presentado este miércoles la restauración de la imagen de Jesús con la Cruz al Hombro, titular de esta hermandad de Sevilla. Esta magnífica talla escultórica próxima al taller de Martínez Montañés ha permanecido durante siete meses en el Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), en donde se han llevado a cabo los tratamientos de conservación-restauración recogidos en el proyecto de intervención tras el estudio científico-técnico realizado por el instituto en abril de 2013.
Durante la presentación, el consejero ha expresado su gratitud a la Hermandad del Valle "por su confianza", así como al IAPH, del que ha dicho se ha convertido "en una referencia en Andalucía, España, la Unión Europea y más allá del océano, fundamentalmente en Iberoamérica". "El instituto ha hecho un trabajo espléndido", destaca Alonso, que señala que la Semana Santa "tiene contextos religiosos pero también culturales", y estos últimos "nos sitúan en un espacio de oferta turística para una ciudad extraordinaria como es la nuestra".
Además, Alonso ha destacado que el patrimonio "no es un legado de nuestros padres, sino un préstamo de nuestros hijos", y, por tanto, "estamos obligados a dejar a futuras generaciones el concepto patrimonial, al menos, como lo hemos recibido". "A partir de ahora todos los sevillanos y aquellos que nos visitan pueden disfrutar de esta imagen tan hermosa", cuyo trabajo de restauración ha corrido a cargo de Cinta Rubio.
Por su parte, el hermano mayor del Valle se ha mostrado "muy orgulloso y contento" de volver a tener en esta iglesia el Cristo ya restaurado, toda vez que ha recordado que el IAPH ha restaurado, además, el Cristo de la Coronación de Espinas y la Virgen del Valle. Respecto a la restauración de la última imagen, ha reconocido que se ha realizado un trabajo "magnífico". La talla se expondrá en el altar mayor durante este miércoles y el jueves, día en que se celebrará a las 20,00 horas la misa de acción de gracias por su regreso al templo.
El instituto ha señalado que es frecuente que las imágenes, sobre todo si reciben culto, se vean modificadas en el transcurso del tiempo por el envejecimiento y transformación de los materiales o por la eliminación o adición de elementos debido al gusto y modas de cada momento. Estas modificaciones obedecen a reparaciones volumétricas o adición de elementos y actualizaciones estéticas, que en el caso del Nazareno del Valle se traducen en el cambio de posición de la imagen, en el volumen del pelo y en las repolicromías que se han identificado.
En relación con la intervención de conservación-restauración efectuada en la imagen, se llevaron a cabo en primer lugar los estudios previos --estudio radiológico, examen de la obra con iluminación ultravioleta, estudio de la superficie polícroma con lupa binocular, análisis estratigráfico e identificación de materiales polícromos y estudio de correspondencia de capas polícromas--, que determinaron que los principales problemas de conservación tenían su origen en el envejecimiento de los materiales tanto originales como los utilizados en anteriores intervenciones, y en la manipulación y uso a que es sometida como imagen devocional y procesional.
Además, en el soporte se localizaron algunas fisuras y grietas, coincidiendo la mayoría de ellas con líneas de ensambles de las piezas que configuran el embón. Respecto a la policromía, presentaba pérdidas de adhesión entre estratos, además de alteraciones cromáticas en zonas donde se había intervenido anteriormente para ocultar pérdidas o deterioros. También se había acumulado en la superficie suciedad que en algunas zonas llegaba a ocultar totalmente el cromatismo de la policromía y la morfología de la obra.
Así, el tratamiento de conservación ha tenido como objetivo la consolidación material de la obra así como la eliminación de la suciedad y los repintes de color no originales sobre la policromía. El estudio e intervención realizado ha aunado y cotejado la documentación sobre la imagen y ha permitido realizar y concretar aspectos fundamentales de su historia material.
Paralelamente al proceso de restauración, se ha desarrollado la investigación histórica-artística, encaminada principalmente a conocer la autoría de la imagen. Hasta el momento, y según el historiador del IAPH Gabriel Ferreras, la investigación ha determinado que en 1736, según consta en documentos que se conservan en el archivo de la Hermandad, se intervino en el pelo y en la corona de la imagen, dándole el aspecto estético que tiene en la actualidad.
Sobre las intervenciones realizadas en la talla por el escultor Emilio Pizarro y Cruz en 1878 y 1879, podemos aportar que éste era secretario de la Hermandad y que también intervino en las imágenes de la Virgen del Valle y del Cristo de la Coronación de Espinas, además de reorganizar la iconografía del grupo escultórico y vender algunas de las imágenes del paso de la Verónica a la Hermandad de la Macarena.
OBRA DEL PRIMER TERCIO DEL SIGLO XVII
Cronológicamente la obra se sitúa en el primer tercio del siglo XVII y su autor puede relacionarse con un discípulo o colaborador de Martínez Montañés por el clasicismo protobarroco y por incidir en la expresividad y emotividad de la imagen. Los estudios morfológicos y estilísticos comparativos realizados con la talla del Crucificado de la Vera-Cruz del municipio sevillano de La Campana, obra de 1616 de Juan Gómez, han descartado la atribución de la autoría a este discípulo de Martínez Montañés. La investigación histórica continúa desarrollándose y los resultados de la misma se recogerán en la memoria final de la intervención.
