La Audiencia Nacional juzgará desde mañana, lunes, a la etarra Ohiana Mardarás Orueta, que se enfrenta a una petición fiscal de 66 años de cárcel por participar en un atentado cometido el 17 de abril de 2008 contra la sede del Partido Socialista de Euskadi (PSE-PSOE) en el barrio bilbaíno de La Peña.
En su escrito provisional de acusación, la fiscal Susana Landeras sitúa a la procesada como integrante del 'comando Basakatu' de ETA en el momento en le que se produjeron los hechos y considera acreditada su participación en el atentado, que causó heridas a seis agentes de policía y daños materiales por valor de 306.769,31 euros (270.150,92 en la sede socialista y 36.618,39 en los vehículos aparcados en las inmediaciones).
La representante del Ministerio Público atribuye a Mardarás un delito de estragos terroristas y seis de lesiones y reclama que indemnice a los seis policías heridos, uno de los cuales reclama más de 776.000 euros por sufrir un aneurisma en una arteria del que tardó 400 días en curarse y por el que quedó incapacitado para continuar con sus ocupaciones habituales.
Según la acusación, la procesada actuó de común acuerdo con los también etarras Ibai Beobide Arza, ya condenado por estos hechos, e Itziar Moreno Martínez.
Los tres prepararon un artefacto explosivo compuesto por cinco kilos de amonal y lo ataron a la puerta de la sede del PSE con una cadena a fin de "potenciar los daños". La bomba estaba dentro de una maleta en la que colocaron un cartel que decía: "Peligro bomba". Media hora antes de la explosión se recibió en la asociación de ayuda en carretera DYA una llamada para avisar del atentado.
