La Fuerza Aérea israelí bombardeó hoy con misiles aire-tierra varias instalaciones militares en la franja de Gaza en respuesta al lanzamiento de dos cohetes anoche contra su territorio, informaron a Efe testigos y fuentes oficiales.
Los aviones israelíes sobrevolaron intensamente la franja antes de lanzar varios proyectiles en el norte centro y sur del territorio, uno de los cuales se oyó en el noroeste de Gaza capital, según testigos.
Bomberos y ambulancias acudieron a las zonas afectadas, pero según fuentes médicas palestinas no se registraron heridos.
La Policía y Fuerzas de Seguridad del movimiento islamista Hamás evacuaron varios edificios e instalaciones militares en diversos puntos de la franja por temor a los ataques de represalia.
Al menos un misil fue dirigido contra una instalación de entrenamiento de las Brigadas Al Kasam, brazo armado de Hamás.
"En respuesta a fuego de cohetes, la Fuerza de Defensa de Israel ha atacado sitios terroristas en Gaza. Ayer (miércoles), dos cohetes fueron disparados contra el sur de Israel desde la franja que cayeron en zonas abiertas cerca de las ciudades de Ashkelon y Netivot sin que se informase de heridos. Es el segundo ataque desde Gaza en los últimos diez días", afirma un comunicado del Ejército israelí.
El Ejército "atacó tres infraestructuras terroristas" y "confirmó haber hecho blanco", añade la nota.
El portavoz militar, teniente coronel Peter Lerner, señaló que los cohetes de anoche "pusieron en peligro más de 140.000 vidas israelíes".
"Los israelíes y palestinos merecen vivir vidas normales pero, en cambio, Hamás elige usar la franja de Gaza como una plataforma de lanzamiento de ataques con cohetes. El Ejército actuará contra la agresión, contra los que intentan aterrorizar a Israel y actuará para proteger a los israelíes del indiscriminado fuego con cohetes de Gaza", señaló Lerner en la nota.
Ninguna milicia palestina ha reclamado la autoría de los ataques, si bien fuentes palestinas que pidieron anonimato precisaron a Efe que fueron lanzados por un grupo salafista asociado con el Estado Islámico (EI).
Ese grupo también reclamó el último ataque y advirtió de que no respetará la tregua mientras Hamás no ponga fin a las redadas contra sus miembros, libere a sus detenidos y les devuelva las armas que les ha confiscado.