La Audiencia de Málaga ha condenado a dos hermanos por intentar matar a un hombre en venganza por una supuesta agresión anterior de éste a uno de ellos. Así, a un procesado se le impone seis años y tres meses de prisión y al otro tres años y tres meses de cárcel, debiendo pagar ambos casi 80.000 euros a la víctima.
Los hechos sucedieron en septiembre de 2012 entre las localidades malagueñas de Mijas y Fuengirola. Según la sentencia, uno de los acusados estaba en una pastelería y fue abordado por dos hombres, uno llevaba una barra de hierro y el otro un palo de golf, que le golpearon y se fueron del lugar.
Tras esto, llegó la Guardia Civil y también el hermano del agredido, quien expresó a los agentes que "se tomaría la justicia por su mano y que lo arreglaría a su manera", marchándose del lugar. Más tarde, el coche en el que iban los dos hermanos interceptó y cortó el paso al vehículo en el que viajaban los otros.
Según la resolución, todos se bajaron del coche y los acusados, con palos de golf, comenzaron a golpear a los dos hombres, primero a uno, que sufrió una contusión en el muslo; y luego a otro, "dirigiendo su ataque hacia la cabeza de éste, con la intención de causarle la muerte".
Casualmente, por la zona pasó un coche camuflado de la Policía Nacional, observando los agentes lo que ocurría, por lo que intervinieron para que parara la disputa; aunque uno de los acusados continuó y "golpeó fuertemente en la cabeza" a la víctima, lo provocó que el policía tuvieron que sacar su arma reglamentaria.
El perjudicado cayó inconsciente al suelo y sufrió múltiples fracturas y heridas sobre todo en la cabeza, así como secuelas como pérdida de sustancia ósea, síndromes neurológicos y alteración traumática; que le incapacitan para determinadas actividades profesionales.
Estas lesiones, por la afectación craneal y cerebral, con hemorragia, "de no haber sido urgentemente tratadas habrían causado la muerte del agredido", dice la resolución, en la que se condena a los dos acusados por un delito de homicidio en grado de tentativa, concurriendo en uno de ellos la atenuante de arrebato.
Asimismo, también se les condena por una falta de lesiones, en relación con la agresión que sufrió la otra víctima, que fue golpeada y cayó al suelo, lo que motivó que la acción se dirigiese al otro lesionado. Así, se les impone a cada uno una multa de un mes, con una cuota diaria de seis euros.
