Para el alcalde de Sevilla, el socialista Juan Espadas, que este pasado domingo cumplió cien días al frente de la Alcaldía, su gobierno ha realizado durante este tiempo “lo más urgente” y ahora “viene lo más importante”.
Así, para el primer edil lo más importante al inicio de su mandato era “priorizar cuáles eran las actuaciones más necesarias”, en referencia a las medidas sociales “que siempre han estado por delante de cualquier cosa para garantiar el suministro de los servicios básicos” o a las actuaciones en los barrios “que no podían esperar más”, por lo que, a partir de ahora, pide “algo más de tiempo” para materializar el resto de sus compromisos.
Con todo, Espadas defiende que durante estos cien dias, que “son sólo una fracción de un mandato de cuatro años”, el gobierno municipal socialista ha logrado “cambiar el rumbo” de la ciudad con la “escucha activa” de entidades y ciudadanos. “La ciudad estaba adormecida y carente de impulso político”, señaló el alcalde, que aseguró que se ha promovido un “reposicionamiento estratégico” para “volver a poner a Sevilla en el mapa como consecuencia de las cosas que se hacen aquí”.
Espadas también se refirió en su pequeño balance a Participa Sevilla e IU. que “eligieron quedarse del lado de la oposición” una vez que le dieron su apoyo para la investidura. Es por ello que el primer edil encuadra sus críticas en “la lógica labor de la oposición”, recordando que en sus primeros cien días como alcalde ha celebrado más reuniones con estos partidos que las que el gobierno popular de Juan Ignacio Zoido realizó con el PSOE durante sus cuatro años de mandato.
Al margen de este tema, el alcalde quiso destacar el actual posicionamiento de Sevilla respecto a otras administraciones, municipios y otras ciudades, señalando que antes la ciudad “estaba de espaldas”. Así, subrayó las alianzas con los municipios del área metropolitana o los encuentros propiciados para activar el eje de colaboración Sevilla-Málaga.
“Estamos escuchando y poniendo los pilares de lo que será el resultado final de estos cuatro años”, finalizó.
Las críticas
Los partidos de la oposición también han realizado un balance de los primeros días. Para el portavoz municipal de C’s, Javier Millán, durante este primer periodo el PSOE tan sólo ha llevado a cabo una política “de meros gestos” y sin “adoptar decisiones transcendentes para los sevillanos”. Según Millán, aparte de formar la corporación, con el organigrama de algunas empresas municipales “aún incompleto”, los primeros meses “han pasado sin pena ni gloria” con algunos gestos como la subida del IBI a locales no residenciales “de cara a la galería”.
“El mayor problema que va a tener el alcalde va a ser la mochila que arrastra por el apoyo de dos partidos de ideología radical, como son IU y Participa”, señaló Millán, al tiempo que indicó que será a partir de la puesta en marcha de los presupuestos generales y de las ordenanzas fiscales “cuando nos haremos una idea del camino que el PSOE quiere para Sevilla” y donde se observará “la marca del tripartito que nos gobierna”.
De su lado, desde Participa han centrado su balance en los temas de política social, exigiendo al gobierno deEspadas que garantice los suministros básicos de luz y agua, así como la creación de un Plan Municipal de Vivienda.
Participa Sevilla lamenta la “falta de transparencia” respecto a la vivienda y reclama “respuestas contundentes” en esta materia. “El Psoe dice cumplir los objetivos marcados, pero no es así”, señaló ayer Susana Serrano, portavoz de Participa Sevilla. Cristina Honorato, concejal de Participa, reseñó los “problemas administrativos de Emasesa” a los que urgió poner solución, algo a lo que se ha comprometido el gobierno municipal de Espadas.
Por último, desde IU han reclamado al alcalde que pase “de los gestos a las concreciones”, ya que “se ha movido más en el terreno de las intenciones que en el de las realidades”.
Para Daniel González Rojas la primera prueba de fuego será la de la elaboración de las ordenanzas fiscales y del presupuesto y pone las líneas rojas de su partido en que se plasmen en estos proyectos “las demandas de pan, techo y trabajo” de la gente.
