El presidente del Atlético Sanluqueño, Manolo Fernández, afrontó uno de los fines de semana más intensos que recuerda. Y no fue para menos. El equipo que dirige José Pérez Herrera derrotó al Cerceda por 0-2 y con este marcador lograba ascender a la Segunda División B.
Tras lo que pasó hace un año en Buñol había que ascenderLa persona más representativa de la entidad verdiblanca destaca cómo fue el partido: “Ves que eres superior pero también lo fuimos hace un año en casa del Levante Atlético y miras lo que pasó. Tranquilo nunca se puede estar en un situación como la que afrontamos. Cuando Alberto Jiménez anotó el 0-1 me tuve que comportar en el palco, con la expulsión de un jugador del Cerceda lo vi más claro y el 0-2, obra de Marc, ya fue definitivo”.
Quiere destacar que “un ascenso del Cerceda hubiera beneficiado a cuatro equipos de la zona, de ahí que nuestra afición tuvo como rivales a otras cinco. El ambiente que se vivió fue muy bonito, el comportamiento del Cerceda con nuestro equipo y junta directiva fue fenomenal y así quiero que se sepa públicamente”.
No deja de reconocer que “me emocioné tras el partido porque vivimos el partido con mucha tensión. Había mucha gente de Sanlúcar y no podía ocurrir lo de hace un año en Buñol. Fue un fin de semana queno podré olvidar tras tanto tiempo luchando y además después de esos problemas acabamos económicamente bien”.
Mantiene que “ofrecemos la continuidad del cuerpo técnico y de toda la plantilla. El proyecto es de continuidad para la próxima temporada. Lo que ocurre es que no sabemos que pasará con algunos jugadores porque hay muchos clubes detrás de ellos, que es lógico. Hemos apostado por gente joven y es señal de que se ha trabajado bien la cantera. También el que disputemos la Copa del Rey será un escaparate para muchos futbolistas”.
Y señala que “tras celebrar el ascenso toca gestionar. Hay que adecentar el campo, tratar las renovaciones y estar pendientes de las normativas y requisitos para militar en la Segunda División B”.
