Los bomberos de Málaga se desmarcan de los actos vandálicos sucedidos en los últimos días, entre ellos, la aparición de carteles contra los jefes del Cuerpo y de Personal en las puertas de su domicilio y entorno personal. "Condenamos de forma clara y contundente este tipo de conductas que podrían ser constitutivas de delito", asegura el colectivo, encerrado como protesta desde el pasado 29 de diciembre y que este miércoles celebra una asamblea para preparar una huelga indefinida que podría desembocar en el ayuno de la plantilla si no se llega a un acuerdo antes del próximo 1 de abril.
Los sindicatos estudian tomar acciones legales contra los que difamen, injurien o pongan bajo sospecha que el Cuerpo de Bomberos está detrás de estos actos, aseguran. Un claro aviso a navegantes tras las declaraciones de ayer del edil de Seguridad, el popular Mario Cortés, que denunció que las protestas de la plantilla "se han convertido en vandalismo", acusando que "no todo vale" para reivindicar mejoras. "Hasta ahora el colectivo se ha esforzado denodadamente con las formas y ha mantenido en todo momento la disposición abierta al diálogo presentando incluso propuestas para la resolución del conflicto que está bloqueando el director de Personal, Carlos Gómez Cambronero", acusan.
El pleno de enero aprobó, tras las mociones presentadas por todos los grupos en la oposición las reivindicaciones de los bomberos, entre ellas, el cese del jefe de servicio por falta de confianza, un nuevo reglamento, la reclasificación y regularización de la jornada.
