Anote bien porque los días 17, 18, 19, 24,25 y 26 tiene una cita ineludible, si quiere pasar un buen rato pero no exento de reflexión, con ‘Intimísimo Garó’, en la Sala Up! del Teatro Alameda.
Un espectáculo que vuelve con las mismas intenciones que en diciembre, primero, hacer pasar un buen rato al público pero también, porque como dice su autor e intérprete, “ha habido un impasse, la gente que me sigue no me veía en los medios de comunicación e ‘Intimísimo Garó’ cuenta todas las anécdotas que no he tenido tiempo de contar en televisión, porque por una parte en los programas de entrevistas se centran más en el corazón y yo tampoco lo he tocado nunca, no porque tenga nada que ocultar, pero no me siento cómodo, y porque creo que el público se merecía una explicación de todo lo que ha ocurrido en estos más de 20 años de trabajo”.
Un montaje en clave de humor,porque como señala Garó, se desnuda ante el público pero “de una manera muy divertida e intentando ser ameno, intentando también lo que siempre he querido que es mi sello, la versatilidad, que la gente me vea bailar, me vea cantar, que es mi trabajo como artista”.
Ángel Garó, que fue un fenómeno mediático en televisión con audiencias millonarias, se vuelca en servir a su público esas vivencias, pero estos dáis también, se centra en otro de los aspectos de su profesión que más le reconfortan, la docencia. Garó da clase de teatros en Academia Pirandello de Teatinos, en la capital, “para gente de todo tipo, escritores, catedráticos de piano, profesores de instituto que no quieren ser actores profesionales y a gente joven que quiere hace la carrera de interpretación. Unas clases donde deja claro el oficio: “Lo primero que se exige a un actor es saber desnudarse porque el actor es como una botella que está llena de machas de alegrías y penas que hay que limpiarse de ellas para poder introducir otro líquido que en este caso es el del nuevo personaje que vas a interpretar y hace falta desnudarse a todos los niveles para llegar a una interpretación creíble y si no el actor se convierte en un personaje característico”.Y esa versatilidad escénica y meterse en el alma de diferentes personajes viene “de saber desnudarse y de saber entregar todo lo que uno tiene de cara al público y poder saber que perfil que vas a interpretar”.
Y para comprobarlo, ‘Intimísimo Garó’, en el Alameda .