Casi la mitad de las comunidades autónomas, ocho de las diecisiete, comenzará el año que viene sin Presupuestos y en un buen número de casos porque el panorama político se ha complicado ante la proximidad de las elecciones autonómicas de mayo, que complican las relaciones entre partidos que han sido socios.
Los gobiernos socialistas de Extremadura, Castilla-La Mancha y Aragón, y los del PP de La Rioja y Castilla y León están sin cuentas y a las puertas de la campaña electoral. Se les suman Cataluña, País Vasco y Andalucía, que no tienen autonómicas en 2019 y están sin presupuestos por motivos distintos.
La prórroga de las cuentas de 2018 no tiene por qué ser definitiva; es posible que se apruebe un Presupuesto en los primeros meses del año, pero el calendario se estrecha porque a finales de marzo se disolverán los parlamentos por la celebración de los comicios.
Quizá sea el caso del gobierno del extremeño Guillermo Fernández Vara, que podría lograr un acuerdo con Podemos en enero aunque de momento las negociaciones no avanzan. El presidente socialista sacó adelante sus dos primeros presupuestos de legislatura gracias a la abstención del PP y el de este año lo aprobó con la abstención de Podemos, acuerdo que intenta repetir para 2019.
También van a prorrogar cuentas el aragonés Javier Lambán y Emiliano García-Page en Castilla-La Mancha. Los dos concluirán una legislatura en la que han tenido muchas dificultades con Podemos para lograr sacar adelante los presupuestos anuales, varias veces fuera de plazo, y no parece que en víspera de elecciones vayan a encontrar más facilidades.
Lambán no ha llegado ni a presentar el proyecto ante las Cortes de Aragón: Podemos le ha señalado unas condiciones mínimas para sentarse a hablar y el presidente dice que no negocia con líneas rojas.
LA EXCUSA: NO HAY PRESUPUESTOS DEL ESTADO
El Gobierno de García-Page, compartido con Podemos desde el año pasado, se excusa sin embargo en que no puede presentar unas cuentas sin que estén aprobadas las del Estado, que fijan objetivos de estabilidad y las cifras de la financiación autonómica, porque no serían "reales". El año pasado sin embargo, sin Presupuestos del Gobierno entonces de Mariano Rajoy, los Presupuestos de Castilla-La Mancha se aprobaron el 21 de diciembre.
Este es también el mismo argumento del Ejecutivo de Castilla y León, gobernado por el PP. Su presidente, Juan Vicente Herrera, se despide del cargo (no será de nuevo candidato) sin dejar Presupuestos a su sucesor del PP, si Alfonso Fernández Mañueco logra gobernar tras las elecciones. Herrera ha pactado toda la legislatura con Ciudadanos, pero esta vez no se ha iniciado ni la negociación.
No lo tiene tampoco fácil el riojano José Ignacio Ceniceros, que aprobó, aunque tarde, los tres presupuestos pasados gracias también a Ciudadanos; esta vez, la formación naranja se ha cerrado en banda acusando al PP de deslealtad y Ceniceros no presentará ni el proyecto: quiere evitar "que sea un instrumento para ningún partido, ni que forme parte de la campaña".
PRÓRROGA EN CATALUÑA, PAÍS VASCO Y ANDALUCÍA
Tampoco tendrán Presupuestos nuevos Cataluña, País Vasco ni Andalucía. Los catalanes tendrán su novena prórroga en los últimos diez años, porque el Parlament sólo aprobó a tiempo el proyecto presupuestario en 2010; el resto se aprobaron arrancado ya el nuevo ejercicio o no llegaron ni a aprobarse.
La complejidad de la política catalana hace imprevisible saber si el Govern logrará pactar a partir de enero o si la prórroga durará todo 2019; en este caso, la Generalitat tendrá que funcionar con las cuentas de 2017, que se han prorrogado ya en 2018.
En el caso vasco, los socios de Gobierno, PNV y PSE, retiraron el 13 de diciembre el proyecto que habían presentado al no lograr avanzar en las negociaciones con EH Bildu.
Y respecto a Andalucía, será el nuevo gobierno que se forme tras las elecciones del 2 de diciembre el que elabore y apruebe los Presupuestos del año que viene.
CRECIMIENTO DEL GASTO
La situación es diferente en el resto de autonomías, con nuevas cuentas aprobadas estos días y que entrarán en vigor el 1 de enero. En muchos casos se prolongan pactos que han funcionado toda la legislatura (Comunidad Valenciana, Navarra, Baleares, Murcia y Madrid), pero en otros, los protagonistas son diferentes.
Por ejemplo, el asturiano Javier Fernández ha logrado un acuerdo de izquierdas por primera vez en la legislatura. El dirigente socialista aprobó junto al PP los Presupuestos de 2016 y 2017, estos últimos prorrogados en 2018, y en el año de su despedida de la política, porque se retira, ha logrado el acuerdo con Podemos e IU, que se le ha resistido hasta ahora.
Un caso particular es también el de Cantabria, donde el Gobierno del PRC-PSOE ha aprobado sus Presupuestos primero con Podemos, luego con Ciudadanos y a continuación con el apoyo de un tránsfuga. Los de 2019 saldrán de nuevo adelante con el apoyo del único diputado de Cs.