La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Sevilla ha ordenado reabrir la causa que investiga la muerte de un preso de la cárcel de Morón de la Frontera (Sevilla) el cual denunció que unos funcionarios le dieron una paliza.
En un auto, fechado el 22 de marzo y al que ha tenido acceso Europa Press, la Sección Primera estima un recurso de apelación contra un auto del 18 de octubre de 2017 del Juzgado de Instrucción número uno de Morón en el que se acordaba el sobreseimiento provisional y el archivo de las actuaciones encaminadas a esclarecer el fallecimiento del recluso.
En el escrito, se recuerda que en mayo de 2017 la madre del referido recluso presentó una denuncia ante la Policía Nacional tras haber recibido una llamada telefónica de su hijo en el que aseguraba que "unos tres cinco funcionarios le han propinado una paliza provocándole lesiones" consistentes en "labio fracturado, pómulo golpeado, nariz fracturada, derrame en el ojo, bultos en la cabeza, imposibilidad de mover ambos brazos, dolor en la clavícula, dolor en el estómago".
Por ello, tal y como apunta el auto, el Juzgado de Instrucción número 1 de Morón dicta un auto para incoar diligencias el 12 de junio de 2017, "día en el que la denunciante comunica que su hijo ha fallecido en el centro penitenciario de Morón el día 8 de junio sin que se hubiera reconocido por el médico forense a su hijo".
Asimismo, el auto también indica que en el parte de asistencia del facultativo que atendió al recluso tras la lesiones señala que el recluso "pudo haberse golpeado en la cabeza contra la puerta por lo que pudo ser reducido por los funcionarios a la vez que intenta agredir a los mismo". "En ese mismo parte del médico constaría que el interno sufría contusión frontal leve, contusión en párpado superior e inferior del ojo derecho, contusión en labio superior", añade el escrito, que a su vez, recoge que "se desconoce el contenido de la autopsia y las conclusiones del Médico Forense, ni consta la historia clínica del interno".
De esta manera, el juez instructor del caso "en atención a estos datos" dicta el auto de sobreseimiento al considerar "que no se encuentra justificada la perpetración de algún delito".
En ese sentido, la Audiencia Provincial considera que ese cierre de la fase de instrucción "ha sido prematura" y estima el recurso para la reapertura de la causa al entender "necesario" que por parte del forense "con los datos obrantes en la causa, el examen de la historia clínica del interno, los resultados del informe de la autopsia, las manifestaciones de los médicos del centro penitenciario sobre las dolencias que hubiera contenido en el informe del centro penitenciario sobre el actuar del interno resulta compatible con las lesiones que refiere en la denuncia, y caso de no corresponderse, explique la forma de causación de las mismas".
