La SD Ponferradina afrontará su tercer partido consecutivo en Málaga marcada, de nuevo, por las ausencias en su plantilla motivadas por los positivos por covid-19, que ya le condicionaron en sus citas anteriores en Almería (3-1) y frente al Girona FC (1-1) en El Toralín.
En esta ocasión los bercianos contarán con las bajas de Larrea, Doncel y Viedma, a los que se unen los lesionados Manu Hernando, Ríos Reina -que sigue arrastrando molestias tras el confinamiento- y Yac Magagi, aunque wste último ya entrene con el equipo y se encuentre en la recta final de su recuperación.
De esta manera, el técnico, Jon Pérez Bolo, que volverá a sentarse en el banquillo dos jornadas después, tras superar también el coronavirus, tendrá que reconfigurar su equipo, aunque tiene alternativas suficientes para ello, pero sin poder contar con la primera incorporación del mercado invernal, el centrocampista Sergio Aguza, que ha de cumplir un partido de sanción pendiente.
En la defensa la única duda es si entrará el canterano exmalaguista Iván Rodríguez en alguno de los dos laterales, con las alternativas en los costados de Paris Adot y Adri Castellano, ya que el centro de la retaguardia parece claro con Pascanu y Amo.
Para la medular, Bolo tendrá que buscar un acompañante para Oscar Sielva ante la baja de Larrea, al que podría suplir con Erik Morán, como en anteriores ocasiones, dejando las bajas para Curro Sánchez, Pablo Valcarce o Gaspar Panadero.
Si finalmente se decanta por mantener dos referencias ofensivas las posibilidades serían Yuri -que parece el único indiscutible- junto con Dani Romera o Kaxe, éste último con escasa presencia desde su lesión en el tabique nasal.
La composición asimétrica del calendario hace que ambos equipos tengan reciente el enfrentamiento en El Toralín de la primera vuelta, disputado el pasado 15 de noviembre, hace poco más de dos meses, con empate (1-1) en el marcador, tras los tantos de Yanis Rhamani en la primera mitad y Curro Sánchez para igualar en la reanudación.
