El Índice de Confianza Empresarialarmonizado disminuye un 2,6% en Andalucía para el cuarto trimestre de este año, según los datos del Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía en el trabajo de seguimiento del pulso empresarial que realiza con la colaboración de las Cámaras de Comercio de Andalucía.
Según este estudio, solo el 15,6% de los establecimientos en Andalucía son optimistas sobre la marcha de su negocio, u volumen que se duplica en cuanto a la visión más negativa, ya que el 30,8% son pesimistas, todo ello fruto del incierto contexto económico que se dibuja en el horizonte por diversos factores como la guerra de Ucrania, la crisis energética, la escalada inflacionista y la subida de tipos.
Todos los sectores presentan una disminución de la confianza con respecto al trimestre anterior, siendo la construcción el sector de actividad con más estabilidad en su visión y el que menos disminuye, con una tasa de variación del -1,4%.
Los negocios que presentan expectativas más optimistas para este final de año son aquellos con una dimensión mediana, con 50 a 199 trabajadores, con un saldo favorable de 1,4 puntos. Los empresarios más pesimistascon los negocios más pequeños, con menos de 10 trabajadores con un saldo de -26,8 puntos.
Este estudio pone de relieve también que el 19,6% de las empresas andaluzas considera que la marcha de su negocio fue favorable durante el último trimestre, frente al 25,6% que la valora como desfavorable. Esto arroja una diferencia de seis puntos que mejora con respecto al trimestre anterior, cuando la distancia entre las opiniones optimistas y las más negativas fue de8,4.
Con respecto a cada provincia andaluza, el Índice de Confianza Empresarial para final de año refleja tasas de variación negativas con respecto al trimestre anterior que oscilan entre el -0,3% de la provincia de Sevilla y el -7,2% de la provincia de Jaén, donde más ha crecido el pesimismo. La única excepción a esta panorámica negativa del tejido empresarial andaluza la protagoniza Málaga, la única provincia en la que sube el optimismo que presenta una tasa de variación positiva de un 0,6%.
El balance de situación en cuanto al nivel de empleo también es negativo, con -1,6 puntos, al igual que ocurre con el balance de expectativas, con -9,7 puntos, manteniéndose así en una línea similar que se registró en el trimestre anterior .
Con respecto al nivel de precios, la tendencia de subida continúa para el final de año mientras en consonancia con lo que se observa en el pasado trimestre, con un mayor número de establecimientos que han subido precios, con un 37,6%, respecto de los establecimientos que han bajado precios (5,5%). Esto supone un saldo de 32,2 puntos, por encima de la expectativa que se tuvo en el trimestre anterior sobre esta variable (27,8).