La estación marítima del puerto de Cádiz ha finalizado la obra de adaptación de sus dependencias para convertirse en terminal de cruceros a partir del próximo día 31 de mayo, cuando el buque de recreo, Grand Voyager, embarque sus primeros pasajeros en la capital gaditana.

A lo largo de esta semana se va a proceder a ubicar el nuevo mobiliario y a instalar el escaner de equipaje.
Las zonas que se han adaptado son el acceso a la propia estación que pasará de los 18 metros cuadrados actuales a 42 metros cuadrados, la sala de espera, que pasará de 187 metros cuadrados a 275 metros cuadrados, la zona de salida hacia el embarque, el escáner, el mostrador de embarque, y el vestíbulo de salida pasarán de tener 70 metros cuadrados a l32 metros cuadrados.

En conjunto se ha previsto que el espacio actual de la estación se aumente en un 58 por ciento (de 298 metros cuadrados a 471 metros cuadrados.