En la elaboración del Reglamento de Participación Ciudadana, ¿qué espacio de participación se le ha dado a las organizaciones que no pertenecen a la Flave? En cuanto a los presupuestos participativos, ni siquiera cuentan con un reglamento, sino solamente con un tríptico, poco creíble, pues es el mismo de años anteriores en los que no se hizo nada de nada, y poco participativo, ya que el cauce que se ofrece es puramente administrativo y nada asociativo, a excepción de la Flave que la convierten también en oficina receptora de propuestas. No podemos dejar de preguntarnos con asombro ¿a quién representa la Flave? El pasado 12 de junio esta organización convocó un acto reivindicativo al cual asistieron unas 50 personas, incluidos los concejales del equipo de Gobierno municipal contra los que se estaba reivindicando y que habían sido previamente invitados. Alguno de los organizadores del acto, no pudiendo disimular su decepción y disgusto por la poca asistencia, arremetió despiadadamente contra los vecinos por no haber asistido. Ni una palabra de autocrítica, ni un esfuerzo de análisis serio sobre las causas de dicho fracaso. Nada, solamente ataque directo a los vecinos. Así es difícil mejorar la participación ciudadana.
Los que conocemos de cerca el movimiento vecinal en El Puerto, sabemos que por desgracia han pasado ya aquellos tiempos en que las asociaciones de vecinos, combativas y solidarias, ponían en jaque a los poderes públicos. Hoy la mayoría de ellas son dirigidas por dos o tres personas, que, con subvenciones del Ayuntamiento, organizan alguna actividad cultural o festiva, y así van manteniendo el tipo como pueden. Muchas de ellas han abandonado el trabajo de calle, el implicar a los vecinos en la toma de decisiones, el seguir día a día sus problemas luchando contra la exclusión y las injusticias que soportan muchos ciudadanos. Por otro lado, algunos dirigentes han mantenido una estructura burocrática y personalista, la Flave, que sin pudor se arroga la representación de todos los ciudadanos, coqueteando con el equipo de Gobierno al cual amenazan a veces, pero de mentirijillas, porque saben que en ese juego está su permanencia y su protagonismo personal. Así es imposible animar a la gente a la participación.
Esta situación no nos alegra en absoluto, porque las consecuencias que se están produciendo son abandono de los barrios a su suerte, huida de los vecinos de las asociaciones, descrédito del compromiso solidario, miedo a realizar convocatorias y alegría entre los gobernantes porque pueden manejar fácilmente a los ciudadanos. En el Foro Social pensamos que es necesario el movimiento vecinal y su federación, y deseamos que vuelvan a ser lo que en otro tiempo fueron; por eso estamos dispuestos a poner nuestro granito de arena para que esta situación comience a cambiar. Estamos abiertos a colaborar con las asociaciones de vecinos en la reivindicación de sus necesidades y en la potenciación de sus actividades, como comenzamos haciendo cuando estaban representadas en el Foro. La Flave debería explicar al movimiento vecinal por qué abandonó el Foro Social y se ve ahora mermada la asistencia a sus convocatorias.
En cuanto al Ayuntamiento de El Puerto, le pedimos que sea claro en sus intenciones. Si pretende de verdad contar con la participación de los ciudadanos, que dé opción a todas las asociaciones e incluso a personas independientes, para poder expresar sus opiniones y estar presentes en la toma de decisiones que les afectan. Sabemos que la participación democrática hace los procesos más lentos, pero es la única manera de animar a la colaboración y de contribuir a que los ciudadanos asuman como propias las decisiones. Si, por el contrario, lo que pretende es seguir tomando las decisiones en solitario y después darles una falsa apariencia de participación ciudadana, reuniéndose con dos o tres dirigentes, nosotros estaremos en contra.