La venta de automóviles cae en un 40% en sólo diez días

“Se acabó la fiesta. Hemos pasado de una subida del 60% a una bajada en la venta de automóviles del 40% en los primeros diez días de julio, por lo que el sector vuelve a atravesar una grave situación que tendrá unas consecuencias muy directas: los despidos”. De este modo, lo aclaró ayer Antonio Romero Haupold, que presidió la asamblea general de la Asociación de Concesionarios de Automóviles de la provincia de Cádiz (Acoauto), celebrada en Jerez.

¿Por qué han bajado las ventas tan estrepitosamente en tan poco tiempo? “Porque si tú haces coincidir en el mismo momento la subida de dos puntos del IVA, con la retirada de las ayudas (Plan E), y con las medidas económicas que han hecho que los españoles desconfíen de la economía, lo que sería una caída natural del 10% se convierte en una caída como la de ahora, que es del 40%”. Es decir, con la llegada del presente mes de julio, el sector automovilístico ha vuelto a los números rojos, y de los 2.000 empleos existentes en la provincia, el 20% vuelve a correr peligro como ya ocurriera en toda Andalucía antes de la llegada de ayudas del Gobierno.

Desde Acoauto, también se dejó claro que “la elasticidad que tenemos es que si el mercado cae un punto se despiden a 1.000 personas en el sector de los concesionarios y, si el mercado sube un punto, se contratan a 1.000 personas”, incidiendo en que la mayoría del empleo en España no está en las fábricas (en Andalucía sólo está Santana) sino en los concesionarios. “Si hay unas 80.000 personas, ahora 60.000 personas, trabajando en fábricas, en los concesionarios hay 180.000 personas”, de ahí la preocupación creciente en este sector. Ante este panorama nada alentador, Romero Haupold espera que “esto se estabilice durante el mes de julio -ahora se vende poco tras la victoria de la Selección-, pero en Jerez, así como en el resto de la la provincia de Cádiz, seguro que terminaremos con una caída del 25%”.

Para el presidente de Acoauto, “la solución a este problema es fácil, porque lo único que tendría que quitar el Gobierno es el impuesto de lujo que tienen los coches, que es el impuesto de circulación”. Y es que pidió que “no nos castiguen con un impuesto de lujo, porque un jacuzzi no tiene un impuesto de lujo y los vehículos sí tienen un impuesto de circulación. Además, este impuesto no lo tiene ningún país de Europa”. Con su eliminación, “la venta de coches no caería como está cayendo”. Otra de las propuestas de Acoauto, es que el Gobierno renovara el Plan E. “El no hacerlo, le va costar unos 500 millones de euros al Estado”, recordando que “el Plan E, que funcionó muy bien, era muy bueno para los clientes porque los coches tenían los mejores precios de la historia y para nosotros porque conseguía parar la sangría de despidos. También era muy bueno para el Estado porque ponía 1.000 euros de su bolsillo pero cobraba 3.000”.

En cuanto al futuro de los concesionarios en la provincia, Romero Haupold, incidió en que “aquí, somos concesionarios fuertes y no nos vamos a ningún sitio, pero sabemos que vienen seis meses complicados, por lo que apretaremos los dientes pero es una pena, porque habíamos salido bien de esta situación, pero las circunstancias nos han metido de nuevo en esta caída del mercado”.

Caída que, si cabe, llega en el peor momento porque “la estacionalidad más alta de ventas es en verano, por lo que un decaimiento en enero afecta menos que en julio, agosto y septiembre”, destacó José Luis Torres, coopresidente de Acoauto, quien también aportó un dato de importancia al mencionar que “se nos ha olvidado una de las premisas: el hecho de que se fueran a terminar las ayudas ha producido también un efecto de adelanto de ventas. Ese crecimiento de mercado, que se ha dado en el primer semestre de este año, son ventas de menos que se van a producir en el segundo semestre”, por lo que “creemos que unas ayudas o unas soluciones económicas razonadas y razonables serían fundamentales para esta provincia y para sanear las cuentas del país”.