Temperaturas máximas de hasta 42 grados activan el aviso en 11 comunidades

Once comunidades han activado este martes el aviso por sofocante calor, sobre todo en Andalucía, ambas Castillas, Extremadura, Galicia y Madrid, donde el nivel es naranja (riesgo importante), debido a temperaturas máximas que alcanzarán hasta 42 grados, informa la Aemet en su web.

Todas las provincias de Andalucía, salvo Almería, Cádiz y Málaga tienen nivel naranja por máximas que oscilarán entre los 39-40 grados; la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) alerta de que en la campiña cordobesa los termómetros pueden alcanzar los 42 grados.

En Castilla y León solo hay nivel naranja en la provincia de Ávila, en concreto, en zonas del sur sonde se alcanzarán lo 39 grados, mientras que en el resto de provincias hay alerta amarilla (riesgo), excepto Palencia, por valores que oscilarán entre los 34 y 38 grados.

Castilla-La Mancha, con aviso naranja, registrará valores muy altos entre los 37-40 grados en todas las provincias, salvo en Guadalajara y Albacete. Desde Aemet inciden en que en puntos de La Mancha de Ciudad Real, el valle del Guadiana y en las sierras de Alcudia y Madrona se superará el umbral de 40 grados en su zona más occidental.

Los termómetros oscilarán entre los 39 y 41 grados en toda Extremadura, con mayor incidencia en las vegas del Guadiana, en la siberia extremeña, Barros, Serena, Tajo, Alagón, Villuercas y Montánchez.

La Comunidad de Madrid continúa con aviso naranja en puntos del área metropolitana, sur, Henares, las vegas y el oeste por máximas hasta los 39 grados, mientras que en la sierra, se prevén hasta 36 grados.

Al noroeste peninsular, Galicia tiene aviso naranja en Pontevedra y Ourense, en esta provincia afectaría con mayor incidencia a la comarca de Verín, por valores máximos que oscilarían entre los 37 y 40 grados.

Las comunidades de Cataluña, Aragón, Navarra, La Rioja y la Comunidad Valenciana están con nivel amarillo por máximas entre los 34 y 38 grados.

La Aemet avisa de que con la alerta naranja existe un riesgo meteorológico importante y cierto grado de peligro para las actividades usuales, y con la amarilla no hay riesgo meteorológico para la población en general, aunque sí para actividades concretas.