Con esta acción, los empleados, acompañados de trabajadores prejubilados y de familiares y amigos, demandan la defensa de los puestos de trabajo y la viabilidad de la citada factoría, propiedad del grupo empresarial de la familia Ruiz Mateos y que está a la espera de entrar en concurso de acreedores.
Manuel Raña, miembro del comité de empresa, defendió la viabilidad de la planta de Caldas y explicó a Efe que aunque se desconoce con exactitud cuándo va a ser declarado el concurso de acreedores por los juzgados de Madrid, se cree que será inminente.
De la misma forma, demandó que se nombre a un administrador para la citada factoría gallega.
La marcha reivindicativa protagonizada por los trabajadores ha estado integrada por unas 130 personas, entre empleados, familiares, amigos y trabajadores prejubilados de la fábrica.
Los empleados comenzaron esta movilización el pasado día 30 de abril y la finalizaron en la jornada de ayer ante la monumental catedral compostelana, tras recorrer más de 40 kilómetros, enseñal de protesta.