Suma y sigue. Este Málaga CF se niega a despertar de un cuento de hadas que comenzó el 22 de junio en Tarragona con el ascenso y que no tiene atisbos de detenerse. La victoria ante el Cartagena por 1-0 consolida a los de Pellicer en la zona noble de la tabla, con 20 puntos tras 13 jornadas disputadas.
Arrancó con una marcha más el cuadro cartaginés, que fue el que gozó de las primeras ocasiones del partido. Los balones a las espaldas de la defensa malaguista fueron un problema, sobre todo con la profundidad que ofrecía Gastón.
Sin embargo, todo estuvo a punto de cambiar en el minuto 18. Kevin Medina se internó en el área y, muy listo, propició el agarrón de Cedric Teguia. El árbitro no lo pitó en primera instancia, pero tras consultar con el monitor del VAR decidió señalar el penalti y amonestar al ex del Ceuta.
Dioni Villalba asumió la responsabilidad. Lo lanzó bien el malagueño, raso, potente y pegado al palo izquierdo de Pablo Cuñat. Desafortunadamente, este le adivinó las intenciones y desvió el tiro con una solvente parada.
El equipo de Pellicer amenazaba, sobre todo, a través de las bandas. Gabilondo y Dani Sánchez no paraban de tirar desmarques peligrosos. Uno de ellos estuvo cerca de convertirse en el 1-0. El malagueño se plantó en el área tras un pase por arriba, pero no llegó a controlar de forma efectiva.
El VAR volvió a ser protagonista en el 34'. Sipcic mandó al fondo de la red una jugada que comenzó tras una acción por la derecha. Sin embargo, el central estaba ligeramente adelantado. 3 minutos después de dar validez, con las líneas ya plenamente tiradas, se señaló fuera de juego para mantener el resultado gafas.
El colegiado añadió seis minutos tras las dos interrupciones, situación que aprovechó de pleno el cuadro de Martiricos. Julen Lobete, una de las novedades en el once titular, puso un centro desde la derecha que, tras un rebote, le llegó el balón a Nelson Monte, que solo tuvo que poner el muslo para mandar el balón al fondo de la red. Con este gol agónico y la euforia de los más de 24.000 asistentes a La Rosaleda se llegó al final de la primera mitad.
El Málaga replicó su buena dinámica del final de la primera parte con un inicio de segundo período más que solvente. Manu Molina tuvo la opción de ampliar la ventaja, mediante un tiro desde la frontal del área con su pierna izquierda que se marchó arriba.
El 'Efesé' no encontraba la forma de llegar a la meta de un Alfonso Herrero que era un espectador más. Por contra, los locales se mantenían sólidos, con algún tímido acercamiento, como un tiro cruzado de Dani Sánchez que se marchó cerca del palo.
Gozó de la más clara el equipo visitante tras un pase de Dani Escriche en profundidad. Gastón se plantó solo ante Alfonso Herrero, que estuvo muy atento y desvió el tiro del delantero, con la ayuda de Einar Galilea en el rebote.
Los minutos fueron pasando y la solvencia malaguista era palpable. El Cartagena lo intentaba con más corazón de cabeza y la poca convicción que suele caracterizar al último clasificado.
Pese a unos últimos minutos de infarto, el resultado no se movió y el Málaga pudo celebrar su cuarto triunfo de la temporada. Solo una derrota después de trece partidos. Una. De trece. El malaguismo vive un sueño del que nadie quiere despertar.
