El cardenal Miguel Ángel Ayuso Guixot, nacido en el barrio de Heliópolis de Sevilla el 17 de junio de 1952, ha fallecido este lunes a los 72 años. Reconocido como cardenal por el papa Francisco el 1 de septiembre de 2019, Ayuso se convirtió en el primer sevillano en décadas en recibir este título, destacando por su labor en el ámbito del diálogo interreligioso.
Perteneciente a la congregación de los misioneros combonianos, Ayuso desarrolló una importante actividad pastoral en Egipto y Sudán hasta 2002. Su dedicación al estudio y la enseñanza del islam le llevó a ser profesor de islamología en Jartum y El Cairo, así como director del Pontificio Instituto de Estudios Árabes e Islámicos hasta 2012. Posteriormente, el 30 de junio de ese mismo año, fue nombrado secretario del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, cargo que desempeñó hasta alcanzar la Prefectura del Dicasterio de Diálogo Interreligioso.
Aunque pasó gran parte de su vida fuera de Sevilla, Ayuso mantuvo siempre un fuerte vínculo con su ciudad natal. Era hermano de la Hermandad del Baratillo y, en un gesto cargado de simbolismo, regaló a la Virgen de la Piedad su cruz pectoral con motivo de su coronación canónica el pasado 14 de septiembre.
El papa Francisco había pedido oraciones por él hace unas horas, reconociendo su grave estado de salud tras años enfrentándose a una delicada enfermedad. Ayuso, como destacó el Pontífice, fue una figura clave en el diálogo entre religiones y en la búsqueda de inclusión y diversidad, contribuyendo con su vida y obra a los retos contemporáneos de la Iglesia.
