El secretario de Organización del PSOE de Málaga, José Bernal, ha criticado este lunes “el recorte de unidades que se está llevando a cabo por parte del Gobierno del Partido Popular en Andalucía en la escuela pública”. Una reducción que supone que “Andalucía va a cerrar este año 2024 con la eliminación de 1.075 aulas en infantil y en primaria” que, en el caso de la provincia de Málaga, serán 158 unidades escolares.
Bernal critica que estos datos suponen “más de un 45% de supresiones con respecto al curso anterior 2023-2024”. Además de señalar que “este recorte” ha afectado a centros ubicados en Málaga capital, (concretamente 47 aulas), cinco en Allaurín de la Torre, cinco en Alhaurín el Grande, cinco en Antequera, seis en Estepona, siete en Fuengirola, 14 en Marbella, cinco en Rincón de la Victoria o seis en Nerja.
En esta línea, la secretaria de Educación del PSOE malagueño, Patricia Alba, ha destacado “el aumento” de aulas prefabricadas y la “falta” de infraestructuras educativas en la provincia: “Podemos hablar que no se ha hecho ni el instituto de Rincón, ni el de Benalmádena, ni el de Mijas, ni la ampliación de un instituto en Alaurín de la Torre”, multitud de infraestructuras que considera Alba, que “eran necesarias para mantener una calidad educativa”.
Además, la dirigente socialista ha criticado que “faltan también plazas de formación profesional, lo que ha hecho que muchos padres tengan que hacer un sobreesfuerzo para recurrir a la formación profesional privada”, al tiempo que “se ha producido un aumento del 11% en el precio del comedor que no ha repercutido en la calidad del mismo”.
Alba indicó en un comunicado de prensa que “desde hace cuatro años que se aprobó el plan de bioclimatización no se ha ejecutado ni una sola infraestructura en nuestra provincia”, mientras que, “por el contrario, se ha aumentado la ratio”.
Además ha señalado que “hay vacantes sin cubrir del profesorado y el caso más sangrante son los niños y niñas con necesidades específicas educativas que siguen sin tener los recursos que les son necesarios para poder tener las mismas condiciones que el resto de alumnados”. La dirigente del PSOE malagueño cifra en más de 40 los centros afectados en la provincia.
Por su parte, Bernal ha insistido en que esta política de supresiones “supone menos contratación de docentes, supone ratios más elevadas y un parón importante en las bolsas de interinos”. Para Bernal, “la Consejería de Educación habla de racionalizar gastos y habla también de la escasa natalidad para justificar esta eliminación en las aulas, pero la realidad es que nos encontramos con el momento adecuado e idóneo para poder bajar las ratios, aumentando de esta forma la calidad educativa que se ha de mantener en una comunidad autónoma como Andalucía”.
También, ha lamentado que en Málaga capital, se han asignado centros que no han sido elegidos por los padres y madres.
Desde el PSOE, en definitiva, han alertado de que “desde que gobierna Moreno, Bonilla (por el presidente de la Junta), en Andalucía y concretamente en la provincia de Málaga, se está produciendo un desmantelamiento de la educación pública malagueña”.
La denuncia de USTEA
También, este mismo mes de diciembre, y tras la publicación en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), el sindicato de enseñanza USTEA-Málaga cargó contra la eliminación para el curso 2024-2025 de 88 aulas, al tiempo que puso el acento en el hecho de que “Málaga capital es la localidad donde se dan casi la mitad de las supresiones de la provincia, perdiendo 42 aulas de Infantil y Primaria”.
Por ello, el Sindicato USTEA Málaga recordaba que “es una localidad muy maltratada por las instituciones, donde las ratios son elevadísimas, sobrepasando el máximo legal en muchos casos”.
Desde el sindicato educativo también destacaron que otras localidades “que llaman la atención son Marbella y Vélez-Málaga, con nueve y siete supresiones, respectivamente”.
A juicio de USTEA, la consejería de educación “se fundamenta en la bajada de natalidad de los últimos años”, mientras que desde el sindicato “niegan que este sea el motivo para la supresión de aulas, ya que mientras el alumnado en la enseñanza pública ha bajado casi 90.000 en esta última década, la enseñanza privada concertada ha subido en 10.000 matriculaciones”.
Estos datos, a su juicio, “arrojan el modelo ideológico del gobierno andaluz, aumentando los conciertos con la enseñanza privada y disminuyendo los gastos en la pública”.
Además, desde USTEA, afirman que “el cierre de unidades solo se está dando en la escuela pública, mientras que la inversión en la privada concertada sigue subiendo: este próximo presupuesto serán 72 millones más, con una inversión de más de 1.000 millones”.
Unos datos que consideran “impactantes”: las supresiones han aumentado un 45,27% respecto al curso pasado.
Para USTEA; otro dato que evidencia la magnitud del desastre a nivel andaluz de este año es que el número de supresiones prácticamente iguala la suma total de las registradas en los tres cursos anteriores.