Ya es historia viva del fútbol malaguista. Las estadísticas del club en su regreso esta temporada a Primera División, en la vuelta también del baenense  Antonio Tapia al banquillo del que que ha sido el club y la ciudad de sus amores, coinciden en señalar que jamás el Málaga Club de Fútbol ha realizado los primeros 19 encuentros de la competición de una forma tan redonda. Con un presupuesto de crisis,  infinitamente inferior a otros clubes, Tapia consiguió terminar la primera vuelta con los mismos puntos que el Atletico de Madrid de  Agüero, Forlán, Maxi o Simao. A un punto, por tanto, de estar en puestos que dan opción a disputar la UEFA; y a dos puntos del Villarreal de Rossi, Senna, Capdevila o Cazorla. Con una plantilla equilibrada, trabajadora, ilusionada e ilusionante, joven también, el entrenador baenense ha vuelto a trabajar con modestia, con eficacia y en silencio.
  
En la capital de la Costa del Sol vuelven a estar encantados con los resultados que propicia la tarea de un Tapia nada mediático, pero muy conocedor del balompié y de cómo sacar el máximo rendimiento a un plantel no hecho a base de talonario, precisamente. "El discurso es el mismo: nuestro primer objetivo es la permanencia”, manifestó a la agencia Europa Press el entrenador nacido en Baena y afincado desde hace muchos años en Fuengirola . Mirando hacia atrás y con los pies en el suelo, pese a que está muchísmo más cerca de jugar en Europa que de volver al pozo de la Segunda División. Él ha batido cifras históricas en la entidad y despertado admiración en la Liga profesional.

Le llaman

También modestamente, reconoció hace apenas dos semanas, que lo desvelado por la Cadena Ser era cierto. Había tenido una oferta de un equipo que quiere volver a la Premier League inglesa, el Queens Park Rangers, uno de los clásicos del fútbol de las islas. Pero Tapia dijo que estaba bien en su casa.  Y quizá no sea la única oferta que tenga.