Ha llegado el día de los jugadores. Al menos, de los que son fans de la marca PlayStation. La cuarta consola de sobremesa de la firma japonesa ha aterrizado en el viejo continente, dos semanas después de su llegada a Canadá y Estados Unidos y antes de su lanzamiento en Japón. Llega con algunos, no muchos, títulos exclusivos como Killzone o Knack y varios multiplataforma que han dado el salto a la nueva generación, como Assassin's Creed (UbiSoft), Call of Duty: Ghosts (Activision) y Battlefield 4 (EA).
PlayStation 4 (PS4) incorpora CPU AMD x86-64 "Jaguar" de 8 núcleos, GPU de 1.84 TeraFLOPS, tarjeta gráfica AMD Radeon de nueva generación, 8GB de RAM GDDR5, disco duro integrado, Blu-ray Disc 6x CAV y DVD 8x CAV, puertos Super-Speed USB (USB 3.0), miniUSB, HDMI, AV analógica, salida óptica digital, un nuevo mando Dual Shock 4 con panel táctil y botón de compartir en redes sociales.
Sin embargo, más allá de características, la nueva consola de Sony se caracteriza por unos servicios online más ambiciosos, un 'dashboard' muy mejorado y mayor interacción con móviles y PS Vita. Todo ello arropado por el potencial de la marca PlayStation, que en España es especialmente popular, y un catálogo de licencias ya con mucha solera en el sector y que no para de crecer gracias a la apuesta de Sony por el desarrollo propio.
Dejando a un lado los juegos y debido a la apuesta por el online y las comunicaciones sociales, Sony ha decidido cobrar por el multijugador en línea a través de la contratación de PS Plus, que antes se podía contratar igualmente, pero no era obligatorio para el juego online. En este sentido, la compañía ha explicado que necesita costear una inversión mucho mayor en esta clase de servicios y que la acogida por parte de los usuarios a las cuotas de PS Plus no han sido mal acogidas.
Que Sony cobre por esta clase de servicio si los usuarios quieren que sea de calidad tiene sentido, puesto que Microsoft ha cobrado siempre por Xbox Live Gold. Además, la compañía japonesa ha mantenido las ventajas que ofrecía el servicio de pago y que ahora se unen al derecho a jugar online, como varios títulos muy atractivos que se pueden descargar, un mayor uso de los servicios en la nube de PlayStation o acceso a descuentos o betas. PS Plus se puede contratar por 6,99 euros para un mes, 14,99 para tres meses o 49,99 por un año.
Sony tiene grandes esperanzas puestas en PlayStation 4, que parte con ventaja con respeto a Xbox One especialmente en el precio. Cuesta 100 euros menos, debido a que no incluye un sensor de captación de movimientos y sonidos como el de Microsoft. Kinect tiene un coste que ha elevado el precio de Xbox One hasta los 499 euros, frente a los 399 euros. En tiempos de crisis y con un catálogo que no marca demasiado la diferencia con respecto a PS3 y Xbox 360, al menos en el mismo lanzamiento, el precio puede ser un factor decisivo para convencer al consumidor para que dé el salto a la nueva generación.
La compañía japonesa espera vender 5 millones de unidades de PlayStation 4 antes de marzo de 2014, tal y como ha comunicado la compañía de forma oficial, y la verdad es que puede conseguirlo gracias al buen ritmo con el que ha empezado. Sony anunció el pasado fin de semana que se habían vendido más de 1 millón de consolas en las primeras 24 horas en las que PS4 estuvo a la venta. Se trata de la misma cifra de Xbox One, con la diferencia de que la consola de Microsoft llegó el 22 de noviembre a 13 mercados, mientras que PS4 se lanzó únicamente en Canadá y Estados Unidos.
Por otro lado, Sony espera que su consola crezca mucho durante el próximo año, gracias a la llegada de muchos más títulos, exclusivos y multiplataforma, desarrollados pensando en la nueva generación, como el nuevo inFamous, Driveclub, Watch Dogs o The Division. Además, la compañía lanzará el servicio de juego en la nube Gaikai, que permitirá cosas como utilizar videojuegos de PlayStation 3 en PS Vita o PS4 vía 'streaming'. Esta función, lamentablemente, aún no tiene fecha de lanzamiento en Europa, debido a la mayor fragmentación del mercado y servicios de banda ancha menos avanzados que en EEUU.