La vicesecretaria de Territorio, Medio Ambiente y Asuntos Europeos del PP-A, Alicia Martínez, ha asegurado este viernes que la reforma de la ley del aborto es necesaria en tanto en cuanto la normativa vigente desde 2010 "es simplemente un coladero para que muchas mujeres puedan utilizar el aborto como medio anticonceptivo".
Así lo ha dicho en una entrevista en Canal Sur Radio, recogida por Europa Press, donde ha advertido que es "un fracaso absoluto" que se produzcan 120.000 abortos al año y que, de ellos, "el 50 por ciento se hayan producido en mujeres que ya lo han hecho entre dos y cinco veces", lo que pone de manifiesto, a su entender, que la ley actual permite utilizar la interrupción voluntaria del embarazo "como medio anticonceptivo".
Frente a ello, según ha argumentado Martínez, el anteproyecto de reforma de la ley del aborto elaborado por el ministro Alberto Ruiz Gallardón "pone el acento en la protección de la mujer embarazada, en la información y en el que tengan acceso a una serie de beneficios para esas personas que son un bien jurídico a proteger como así lo ha dicho en muchas ocasiones el Tribunal Constitucional".
Además, ha recordado que esta reforma era un "compromiso electoral" del PP para que "haya un equilibrio entre los derechos de la madre y el no nacido" y que recoge el sentimiento de "la mayoría social" del país tal y como demuestra un estudio conocido hoy por la prensa y que señala que "casi el 90 por ciento de la sociedad ve necesario que los padres autoricen a las menores" la interrupción voluntaria del embarazo.
Con todo, la dirigente 'popular' ha considerado "absolutamente razonable" que se abra un debate en el Congreso de los Diputados en torno a este tema y que recoja "todas las aportaciones de todos los grupos en un marco del mayor consenso posible".
Preguntada sobre la libertad de voto que el PSOE e IU piden para los diputados del PP, Martínez ha dicho que "el voto debe ser siempre en conciencia, sea o no secreto". "Yo lo he hecho así siempre", ha añadido la 'popular' para señalar que es "imposible que un político vote sin coherencia".
