“Actitud deleznable, bajuna, intimidatoria y antidemocrática”. Así califica el concejal de IU Julio Acale la postura adoptada por el alcalde, Enrique Moresco, hacia los consejeros que esta formación política tiene designados en las empresas municipales a los que ha exigido que guarden confidencialidad de todo lo que se debata en los consejos de administración.
Acale explica que su consejera en Apemsa, Matilde Roselló no asistió al último consejo de esta empresa, excusando su ausencia de forma justificada. A raíz de este hecho, la consejera ha recibido una “nota de apercibimiento para recordarle la obligación de guardar confidencialidad que tienen los consejeros sobre los asuntos que se traten en los consejos, haciéndolo extensivo al resto de los consejeros de IU en las restantes expresas municipales”, explica el concejal.
Para Julio Acale esta actitud es impropia de un sistema democrático, ya que en la misma nota, el alcalde viene a reconocer que “los consejeros responderán frente a los propietarios de la empresa” que en este caso es el Ayuntamiento, por lo que lo lógico es que informen de su actividad tanto al grupo municipal al que representan como ante la asamblea local que los eligió. El concejal de IU no puede entender esta postura de Moresco. “Con tintes claramente antidemocráticos, al más puro estilo Berlusconi, intenta censurar la participación ciudadana no sólo impidiendo que colectivos ciudadanos como la Flave participen en los consejos, sino que además intenta intimidar a los consejeros de los partidos políticos para que ni comuniquen los asuntos tratados con el grupo municipal y el partido que los propuso”.
El trasfondo de toda esta polémica parece estar el funcionamiento de la depuradora Las Galeras. “Hay que decir que ni siquiera es necesario romper la confidencialidad para que cualquier ciudadano se dé cuenta de que la negativa a publicar los valores absolutos de la DQO, DBO5 y sólidos en suspensión, solicitados repetidamente por nuestra consejera y por mí mismo como concejal de Izquierda Unida y miembro de la junta general, son los que dan pábilo a todo tipo de ocultamientos y rumores”, añade Julio Acale. El concejal aclara que Izquierda Unida sabe que los criterios que admite la Consejería de Medio Ambiente para verificar el funcionamiento de la depuradora son cumplimiento de valores absolutos y reducción expresado en términos relativos de la carga contaminante. “Si todo funciona tan bien como dicen, lo que queremos es que en el recibo del agua aparezcan tanto uno como otro, y no exclusivamente el que publican de porcentaje de reducción”, indica.
En cualquier caso, IU apoya lo reclamado por el colectivo ecologista en el sentido de que “ya que perdieron el juicio, lo mínimo que debería hacer Apemsa es una rectificación pública”.
En cuanto a la actitud de Enrique Moresco, esta formación elevará una protesta formal en los consejos de administración que están próximos a celebrarse. Por último, sugiere al alcalde que él mismo guarde discreción, “ya que en numerosas ocasiones es él el que filtra a los medios y hace público lo que le da la gana, especialmente si sirve para autobombo propio y para desprestigiar a la oposición”, y recuerda que varias veces “hizo público el sentido del voto de nuestros consejeros, por todo ello y por aprovecharse de la ausencia de nuestra consejera, IU califica la actitud de Moresco de bajuna y deleznable”.