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El mejor partido en casa termina en derrota

El CD Roquetas dejó escapar tres puntos importantes del Peroles ante un Melilla que siempre fue inferior al equipo de Florit. Otro extremeño deja de pitar un clarísimo penalty sobre Kike Lorenzo en el minuto 90

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Buscando una explicación al cielo ya que en la razón no cabía respuesta, quedaron los jugadores rojillos al finalizar un partido que se despidió con la injusticia como bandera. El equipo de Florit salió con el firme propósito de conseguir adueñarse de la pelota, tratarla bien, y entrar con ella por ambas bandas hasta la misma línea de fondo. El objetivo se consiguió en repetidas ocasiones pero la pelotita, caprichosa como toda la temporada, se negó a entrar entre los tres palos. Fue ambicioso el Roquetas desde el inicio, Florit cambiaba el sistema por primera vez en la temporada para jugar con dos medias puntas, Molas y Jorge Pérez,  dejando sólo a Esteban como mediocentro.

Esto sorprendió a los visitantes que veían impotentes como los rojillos llegaban a su área de forma fácil y sencilla. Pero los últimos 15 metros se siguen resistiendo y la puntería no se afina para estar a la altura del juego global.

En la primera mitad, el Roquetas se enfrentó hasta en 3 ocasiones a la porteria melillera franca para el gol, pero en ninguna de ellas, acertó a introducir la pelota entre los tres palos. Primero, en el minuto 19,  fue una llegada de Javicho por banda izquierda poniendo una pelota medida a la cabeza de Luque, que sólo ante Dorronsoro, falla un gol que ya cantaba la grada. Pero el asedio continuaba y sólo un minuto después una jugada calcada a la anterior con cambio de protagonistas tenía el mismo final. Quién centraba en esta ocasión era Jorge Pérez y quien cabeceaba fuera Kike Lorenzo.

El Melilla sólo se acercó en una ocacion a la meta de Bernal. Fue en el minuto 25 y merced a una falta lateral que lanzó con mucha intención Acorán para que el cancebero rojillo se luciera en una gran parada. Pero, sólo fue un espejismo. El Roquetas siguió a lo suyo, y tres minutos después, de nuevo Luque, disparaba fuera otro balón de gol. El dominio rojillo era insistente y Esteban en el minuto 30, vuelve a tener otra gran oportunidad para adelantar al Roquetas en el marcador. Un disparo desde fuera del área tras un rechace pone a temblar los cimientos visitantes. Y asi discurrieron los últimos minutos de la primera mitad, con dominio siempre de un Roquetas  que debió sentenciar un partido antes de llegar al ecuador del encuentro

Pero, la segunda fue exactamente igual que la primera. En el minuto 65 Esteban desperdicia una grandisima oportunidad de gol, enviando fuera un cabezazo a bocajarro desde el borde del área pequeña cuando todos en la grada se habían levantado para celebrar el tanto. Dos minutos después, Jorge Pérez tras la salida de un corner enebra una bonita jugada para dejar el pase de la muerte con el cancerbero melillero ya vencido sin que nadie llegue a rematar al borde del área de gol. Una nueva falta en el minuto 70, es otro argumento de ataque rojillo que quería evitar primero el empate y luego la derrota, pero Jorge Pérez, una vez más y muy activo toda la mañana, no acierta a rematar con efectividad.
 
Pero quien tanto perdona, al final siempre lo termina pagando. La unica llegada del Melilla en la segunda parte termina en gol. Una jugada por banda izquierda, en una dudosa posición de salida, es rematada a gol por Chota, que había saltado al terreno de juego 6 minutos antes.

La desolación era total. El mejor partido del Roquetas en casa iba a terminar en derrota. Con todo en el terreno de juego, Kike Lorenzo y Diego Herrera incluidos, el Roquetas sigue dominando y tiene hasta dos oportunidades claras de gol, más una tercera que todavía no explicamos a entender como no acabo en la meta de Verdejo que había sustuida a Dorronsoro que se marchó lesionado. Un balón franco llega a Kike Lorenzo que apenas a tres metros de linea de gol y sólo para matarla, la empuja fuera ya que no puede disparar tras cometer sobre él un clarísimo penalty que no pita el árbitro.

El futbol no fue justo, y en eso está en gran medida la grandeza de este deporte, pero cuando te toca la peor parte, sólo cabe preguntarse cuando el deporte rey nos devolverá lo que hoy y el pasado domingo nos ha quitado.

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